El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) anunció que otorgará a la Argentina un total de US$3.800 millones en créditos durante los próximos dos años, destinados a proyectos tanto en el sector público como en el privado. El presidente del BID, Ilan Goldfajn, confirmó esta asistencia financiera durante una reciente reunión con el ministro de Economía, Luis Caputo.
De acuerdo a datos de la agencia NA, US$2.400 millones se destinarán al sector público y se desembolsarán antes de fin de año. El resto, US$1.400 millones, será distribuido durante los próximos dos años para financiar proyectos privados relacionados con áreas estratégicas como infraestructura, energía, agronegocios y minería, incluyendo iniciativas vinculadas a la explotación del litio, un sector clave para la economía argentina.
El financiamiento para el sector público estará orientado a mejorar la eficiencia del gasto estatal, cubrir subsidios energéticos y fortalecer la protección social. En cuanto al sector privado, el BID apoyará más de 20 proyectos que buscan promover el desarrollo económico y la generación de empleo, destacándose la participación de la industria del litio como un motor de crecimiento para el país.
El BID reconoce los resultados económicos positivos de la Argentina desde la llegada de Javier Milei
En un artículo publicado en el Financial Times, titulado «Las reformas van a ayudar a la Argentina a liberarse de su historia», Ilan Goldfajn subrayó los avances económicos del gobierno de Javier Milei. El titular del BID destacó que, en solo siete meses de gestión, se ha logrado reducir el déficit fiscal y alcanzar un superávit, lo cual considera fundamental para estabilizar la economía argentina y atraer nuevas inversiones.
Goldfajn también elogió las medidas de desregulación impulsadas por el Poder Ejecutivo y afirmó que la combinación de un sector público eficiente y un sector privado dinámico es esencial para superar las crisis económicas recurrentes y generar un crecimiento sostenible a largo plazo.
El BID estima que, con una mejora en la eficiencia del gasto público, la Argentina podría reasignar hasta un 7% de su PBI, lo que permitiría redirigir recursos hacia los sectores más vulnerables de la población. Además, el organismo internacional continuará colaborando con el gobierno argentino para optimizar el uso de los fondos y garantizar que estos se utilicen de manera efectiva en beneficio de la sociedad.
Este apoyo financiero del BID refuerza la confianza en las políticas económicas implementadas por el gobierno argentino y brinda una oportunidad para fortalecer sectores clave de la economía.