La subsecretaria de Gestión Administrativa de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia, Constanza Cassino, presentó su renuncia luego de que la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, se lo solicitara tras conocerse denuncias sobre irregularidades en la compra de una costosa cafetería. La renuncia de Cassino será efectiva el 31 de octubre, según el memorándum oficial que Manuel Adorni, vocero de Javier Milei, compartió en sus redes sociales.
Este movimiento en el Ministerio de Capital Humano se produce días después de que el dirigente social Juan Grabois publicara en X (antes Twitter) una serie de acusaciones contra Pettovello, respaldadas con facturas, en las que señaló sobreprecios en la compra de café y servicios de catering. Grabois afirmó que estos gastos, sumados a los sueldos de la funcionaria, representan una falta de prioridad en el uso de fondos públicos, los cuales podrían destinarse a otras necesidades urgentes.
«La cafetera con espuma y sobreprecio ($1,917,000) y los triples del catering de Pettovello (3 palos sospechosamente redondos) se pagan con 6,444 raciones de almuerzo según el PNUD», escribió Grabois en su tuit, criticando duramente los privilegios de los que gozan funcionarios mientras desatienden a sectores vulnerables. También se refirió a supuestos sobresueldos distribuidos entre personas que considera de dudosa reputación, y al sueldo de Pettovello, que describió como equivalente a 5.254 raciones de comida.
En su tuit, Grabois no escatimó en críticas, y cuestionó el accionar de la justicia, a la que calificó de «lentejuela», aludiendo a una falta de celeridad en la investigación de estos presuntos casos de corrupción. La publicación generó gran revuelo en redes sociales, y muchos usuarios replicaron las denuncias y exigieron explicaciones a las autoridades.
La respuesta de Adorni ante las denuncias de Grabois al Ministerio de Capital Humano
Manuel Adorni, vocero de Javier Milei, fue el encargado de confirmar la renuncia de Cassino a través de un post en redes sociales. Adorni aclaró que Pettovello, al enterarse de la situación de la compra de la cafetera, pidió la renuncia de la funcionaria. Esto fue interpretado como un intento de dar por cerrado el asunto de manera inmediata y sin mayores explicaciones.
La administración de Milei se ve presionada a responder a estas denuncias, especialmente cuando se trata de gastos en un contexto de austeridad y ajustes que afectan a diversos sectores. La renuncia de Cassino representa, según analistas, un movimiento para mitigar las consecuencias del escándalo, pero las críticas continúan y Grabois sigue exigiendo una investigación profunda sobre los gastos en el Ministerio de Capital Humano y otros organismos del Estado.