La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, confirmó este sábado la existencia de la denuncia contra el expresidente de Bolivia Evo Morales por hechos aberrantes ocurridos mientras vivía en la Argentina como asilado político durante el gobierno de Alberto Fernández, sobre quien, dicho sea de paso, pesa una denuncia por corrupción en la contratación de seguros y otra por violencia de género contra la exprimera dama Fabiola Yáñez.
La propia Bullrich, en un duro posteo en redes sociales contra Morales este sábado, confirmó la presentación judicial después de la denuncia que, según precisó, hizo en el Ministerio de Seguridad. “A la causa por abuso de menores que ya tiene abierta en Bolivia se suma algo aún más aberrante: al socialista expresidente boliviano se lo acusa de haber convivido con 4 adolescentes durante el asilo político que le brindó el kirchnerismo”, apuntó la ministra.
En esta línea, agregó: “El peor de los delitos, en nuestro suelo. Por eso, presentamos una denuncia por presunta comisión de delitos de trata de personas y abuso sexual”. La funcionaria compartió en X (antes Twitter) el audio de una entrevista radial de horas atrás en la que había confirmado que hace dos semanas recibieron “una denuncia de un particular respecto de esta conducta de Evo Morales” y de inmediato lo judicializaron.
“Esta denuncia del Ministerio de Seguridad hace quince días está dando vueltas. No le dimos publicidad por los niveles de violencia que había en ese momento en Bolivia, nos pareció que no era adecuado. Tampoco la Justicia le dio publicidad. Pero esa, la primera denuncia, llega al Ministerio de Seguridad y es judicializada de manera inmediato”, precisó Bullrich. Y destacó que lo informa ahora porque ya hay otras denuncias por esa supuesta conducta del dirigente político boliviano.
La denuncia de la Fundación Apolo contra Morales
En tanto, la Fundación Apolo, a través de su jefe de Legales, Yamil Santoro, también denunció penalmente a Morales. Según su presentación, diversos testimonios y fuentes señalan que el expresidente de Bolivia convivió en Argentina, durante su estadía entre 2019 y 2020, “con menores de edad que habrían sido trasladadas desde Bolivia, en condiciones presuntamente vulnerables, para realizar labores domésticas y personales”.