El consultor político ecuatoriano Jaime Durán Barba, en su análisis sobre las recientes elecciones en Estados Unidos, ofreció una mirada crítica y detallada de la nueva manera de hacer política en la actualidad, marcada, según él, por la primacía del espectáculo sobre el contenido. En sus declaraciones, Durán Barba sostuvo que, en este contexto, figuras como Donald Trump han entendido y explotado a fondo el cambio hacia la política como show.
“La política fue siempre espectáculo, en parte, y ahora es casi solo espectáculo”, afirmó. Para Durán Barba, la figura de Trump es un ejemplo claro de cómo este fenómeno se despliega en la arena política. En lugar de basarse en argumentos sólidos o teorías, Trump “dio más importancia a freír las papas que a sus tesis y sus teorías”, subrayó en A24. Según el analista, en el entorno mediático y superficial actual, el contenido ideológico pasa a un segundo plano frente al carisma o la capacidad de generar polémica.
La política visual: debates sin contenido
Durán Barba también señaló que los debates políticos ya no se oyen por sus ideas o propuestas; más bien, se miran como espectáculos audiovisuales. “Nadie sabe lo que dicen los tipos en el debate, se ven los debates”, puntualizó, subrayando cómo el público se concentra en los gestos, las actitudes y los momentos provocadores, en lugar de prestar atención a las propuestas de los candidatos.
Para ilustrar su punto, Durán Barba confesó que si tenía que elegir entre escuchar a Kamala Harris o a Trump, prefería este último porque “era mucho más divertido”. Según el consultor, el atractivo de Trump radicaba en su capacidad de mantener al público a la expectativa, ya que “siempre había alguna tontería que iba a decir, algo que iba a indignar a alguien o alguna actitud estrafalaria que iba a tomar”. Para Durán Barba, este tipo de comportamientos no solo hacen más llamativa la política, sino que también generan reacciones emocionales en los espectadores, captando su atención de manera más eficaz que los debates profundos o las posturas ideológicas tradicionales.
La disyuntiva de los políticos tradicionales
El consultor extendió su análisis a la política argentina y afirmó que los políticos de la vieja guardia enfrentan un dilema: adaptarse a esta nueva realidad o quedar relegados. “Hubo una nueva manera de hacer política. Los políticos antiguos están en esta disyuntiva en Argentina”, comentó, mencionando específicamente a figuras como Cristina Kirchner y Mauricio Macri, quienes, según él, están “caducos” en este contexto.
Para Durán Barba, el futuro de los líderes tradicionales depende de su capacidad de “conectarse en serio con esta nueva actualidad”, es decir, adaptarse a una política centrada en el espectáculo y el impacto visual, donde el mensaje se simplifica y la atención del público se gana más por lo que se hace que por lo que se dice. En su opinión, esta transformación es clave para evitar ser superados por figuras disruptivas como Javier Milei o incluso por otros actores que puedan surgir con estilos más innovadores y carismáticos.
“Hay que ver si algunos de ellos logran resucitar repensándose”, sostuvo Durán Barba. De no lograr esta reconexión con el nuevo esquema político, “seguirá Milei en el poder o llegará alguien más distinto que él”, concluyó. Para el consultor, la política moderna se encamina hacia una transformación que desplaza a los políticos tradicionales a menos que estos logren reinventarse, entendiendo y adoptando las reglas del espectáculo que hoy domina la escena pública.