Juana Viale decidió contar lo que vivió con su hija y dio detalles de su singular historia. Sucede que la famosa se remontó al momento en el que nació Ámbar de Benedictis y recordó sus primeros pasos en la maternidad a los 21 años de edad.
En diálogo con Ohlalá, la nieta de Mirtha Legrand dijo que su incursión en el rol de madre se dio de manera orgánica y relató: “Yo creo que es más natural, como que es una cosa cíclica de la vida, no me lo pensé tanto, tampoco. Sí quise ser madre, no cuando me quedé embarazada, sino antes. Entonces, fue algo como muy a conciencia, pero el embarazo lo viví muy natural, muy incorporado, no tuve el “síndrome de la madre primeriza”.
Sobre ese atapa en particular, Juana Viale añadió: “Me acuerdo de que mi mamá había sido madre hacía poco, de Rocco, mi hermano más chico, y yo, cuando nació Ámbar, era como ‘no tengo ni idea’. Ámbar estaba toda vestida de celeste todo el día, porque era lo que había en el hogar, heredé eso y la vestía así. Y nunca fue tanto problema la crianza, siendo tan joven, ¿no? Empecé a trabajar a los tres meses de que la parí”.
“Ninguna de mis amigas era madre, y me pasaron cosas divertidísimas, como salir a bailar y dejarla a Ámbar con los papás de Jime, una amiga mía, y después ir a buscarla a las cinco de la mañana, entrar y decir: ‘Me la llevo al cuarto a dormir’”, añadió la conductora de Canal Trece sobre su experiencia.
Juana Viale reflexionó sobre las peleas con su hija
“Viste que los hijos son los que más te pueden dañar, ¿no? Te dicen las cosas más hirientes, no hay ser en la tierra que te pueda herir tanto como un hijo. Pero automáticamente vos sabés que eso pasa, no sé, es como un tamiz que una tiene”, comenzó contando la famosa.
Acto seguido, Juana Viale añadió: “Entonces, en esa ambivalencia emocional que tenemos todos los seres humanos, y especialmente los hijos cuando van creciendo o son adolescentes, me parece que siempre volvemos a lo más importante, que es el amor. No importa si vos tenés razón o si yo tengo razón. No importa nada, importa el amor, para mí”.