La actividad económica en la Argentina registró una nueva caída en septiembre. En términos interanuales, el índice mostró una contracción del 3,3%, mientras que en la comparación mensual desestacionalizada la baja fue del 0,3%, revirtiendo el leve repunte observado en agosto. El Gobierno de Javier Milei acumula 10 meses de caída en la actividad.
El informe del Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) publicado por el INDEC destacó que cuatro sectores de la economía mostraron subas en la comparación con septiembre de 2023. Entre ellos, se destacan Explotación de minas y canteras, con un crecimiento del 7,6%, y Agricultura, ganadería, caza y silvicultura, que avanzó un 3,1%. Sin embargo, estos incrementos no lograron compensar las caídas registradas en la mayoría de los sectores.
Once de los sectores evaluados presentaron caídas interanuales significativas. Pesca lideró las bajas con un desplome del 25,2%, seguida por Construcción (-16,6%) y Comercio mayorista, minorista y reparaciones (-8,3%). Estas últimas actividades, junto con la Industria manufacturera (-6,2%), explicaron la mayor parte de la contracción del EMAE en el período, restando en conjunto 2,7 puntos porcentuales al índice general.
Argentina no repunta: la construcción sigue cayendo en el 2024
El retroceso de la Construcción refleja la debilidad del sector frente a las dificultades económicas, mientras que la caída en el Comercio y la Industria manufacturera evidencia el impacto del menor poder adquisitivo de los hogares y la inflación persistente. Estos datos consolidan un panorama adverso para la recuperación económica en el corto plazo.
Por otro lado, el crecimiento en sectores como Explotación de minas y canteras podría estar vinculado a la recuperación de la demanda de commodities a nivel global, mientras que la suba en Agricultura responde a un repunte en la producción tras un período de sequía. No obstante, estos resultados positivos no logran impulsar al conjunto de la economía.
Con septiembre sumando otra contracción interanual, se acumulan varios meses consecutivos de retrocesos en la actividad económica (salvo agosto 0,3% positivo), lo que pone en duda las expectativas de mejora para el último trimestre del año. Analistas destacan que los desequilibrios macroeconómicos, como la inflación y las restricciones cambiarias, continúan afectando negativamente al crecimiento.