El Movimiento Socialista de Trabajadores (MST) realizó un corte y movilización en el centro de la Ciudad de Buenos Aires, generando importantes demoras. El corte se realizó en la calle libertad, justo en la esquina con la Avenida Santa Fe y se extiende casi hasta Marcelo T. de Alvear. Lo particular del caso es que la Policía se encuentra allí, pero no están aplicando el protocolo de Patricia Bullrich.
Esto quiere decir que la calle se encuentra completamente cortada y nadie puede circular ni acceder por esa zona a la Avenida 9 de Julio, una de las calles aledañas. Este. «Hoy el sionismo probablemente sea la expresión más cruda, más terrible y nefasta del capitalismo imperialista», se escucha alzar la voz a uno de los manifestantes con un altavoz.
«Esos despropósitos y artilugios del cual se valen los gobiernos y estados cómplices del genocidio para desprestigiar la lucha y causa por el pueblo israelí«, completa. Esto demuestra que se trata de una manifestación con una finalidad ideológica y política, otro de los motivos que habilitan a Patricia Bullrich y a las fuerzas de seguridad a aplicar el protocolo que, por ahora, no se aplicó.
El protocolo de Patricia Bullrich
En diciembre de 2023, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich anunció su protocolo antipiquetes y afirmó: «Las calles no se toman. Si se toman las calles, habrá consecuencias. Ya se sabe, vamos a ordenar el país; el corte se termina». Entre las tantas premisas anunciadas esa tarde, la funcionaria del PRO sostuvo que «el que corta no cobra» y que las organizaciones pagarán los gastos del operativo policial.
Bullrich detalló que serán «identificados los autores, cómplices e instigadores» de los piquetes, como también los vehículos o micros y conductores que trasladen a manifestantes. También adelantó que habrá consecuencias para quienes se encuentren con el rostro cubierto y quienes lleven a niños a las marchas, advirtiendo que serán notificados sobre este hecho.
También señaló que los agentes actuarán hasta despejar totalmente el espacio de circulación y advirtió que, para llevar adelante las medidas, «emplearán la fuerza mínima y suficiente, que será graduada en proporción a la resistencia» de los manifestantes. Emplearán armas no letales para despejar «la concentración de personas o colocación de vallas u otros obstáculos que incidiesen en la libre circulación de vehículos o estorbaren el tránsito ferroviario, aun cuando no crearen una situación de peligro».