El exjefe del Estado Mayor General del Ejército durante el gobierno de Cristina Kirchner, César Milani, estalló este viernes contra el gobierno de Javier Milei, precisamente contra el ministro de Defensa Luis Petri, porque no lo dejan festejar su cumpleaños en un salón del Ejército. A raíz de ello, el general retirado se manifestó a través de un extenso mensaje en la red social X.
“La paupérrima gestión del Ministerio de Defensa, a cargo del escenógrafo profesional Luis Petri, que está sumiendo a los efectivos de las Fuerzas en una miseria pocas veces vista y a las unidades y sus materiales en un estado de abandono alarmante, se preocupa más por dónde voy a festejar mi cumpleaños que por intentar que las fuerzas armadas no se caigan a pedazos”, arrancó su descargo Milani.
El polémico exgeneral sostuvo que se trata de una tradición. “Así como se lee, Petri acaba de prohibirme utilizar un salón militar para tal fin, tradición que algunos militares aún conservamos para fechas importantes, también se ocupó de impedir mi participación en los actos del arma de ingenieros”, remarcó el exfuncionario de Cristina Kirchner.
En esta línea, continuó: “Fuentes cercanas manifiestan que está enardecido por saber que un grupo cada vez más grande de militares defendemos los intereses nacionales, velamos por nuestra obra social, los sueldos de los camaradas, el equipamiento de nuestras Fuerzas y los recursos de la nación, y no nos envolvemos en la bandera de Estados Unidos, Israel y otras potencias”.
La embestida de Milani contra Petri
Fue así que liquidó a Petri, al indicar que “el caprichoso ministro debiera entender que el Ejército no es propiedad privada de él ni del Gobierno”. “Como exjefe del Ejército, puedo ingresar a una Unidad Militar para hacer uso de sus instalaciones habiendo previamente acordado con las autoridades correspondientes, o concurrir a una ceremonia interna del arma de Ingenieros cuando me invitan en mi calidad de Teniente General Retirado”, puntualizó.
Por último, advirtió al funcionario: “Petri, usted no es un emperador y las Fuerzas Armadas no son su juguete. Mejor dedíquese a gestionar que bastante mal lo está haciendo y deje de ejecutar presiones y actos autoritarios desconsiderados y arbitrarios sobre los mandos de las Fuerzas Armadas para que restrinjan su libertad de expresión, efectuando persecución ideológica a los militares cuando son críticos a su inepta, ineficiente e irresponsable gestión”.