La gestión de la provincia de Buenos Aires, encabezada por Axel Kicillof, ha generado controversia al responder a las recientes modificaciones anunciadas por el Ejecutivo Nacional en el régimen migratorio, asegurando que la atención médica en los hospitales públicos bonaerenses seguirá siendo gratuita para los extranjeros. Esta declaración se produce en un contexto donde el Gobierno nacional propone arancelar la atención sanitaria a personas no residentes, una medida que ha suscitado fuertes reacciones en diversas provincias del país.
Nicolás Kreplak, ministro de Salud bonaerense, fue claro en su postura al descartar cualquier intención de cobrar por la atención médica a extranjeros en los hospitales públicos de la provincia. En un comunicado publicado en la plataforma X, Kreplak calificó las «medidas» del gobierno nacional como carentes de entendimiento sobre el funcionamiento del sistema de salud y acusó que buscan «provocar, generar odio y resentimiento». Además, advirtió al Gobierno de la provincia que «no cuenten» con Buenos Aires para implementar cargos por la atención sanitaria a extranjeros.
El ministro también manifestó su sorpresa al señalar que durante la reciente reunión del Consejo Federal de Salud, el tema de cobrar a los extranjeros no fue mencionado. «Ayer estuvimos con las y los ministros de salud de todo el país y nunca se planteó una situación ni similar a la anunciada», afirmó Kreplak, reafirmando la postura de la provincia de mantener la atención gratuita.
En sus declaraciones, el funcionario respaldó sus argumentos con datos que demuestran que la atención a personas no residentes representa un impacto mínimo en el sistema de salud bonaerense, con solo el 0,2% de las consultas y el 0,8% de las internaciones correspondientes a extranjeros.
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En contraste, el vocero presidencial, Manuel Adorni, presentó argumentos basados en experiencias provinciales como la de Salta, donde desde febrero se ha cobrado la atención médica a extranjeros, reportando una disminución del 95% en la atención a estos y un ahorro de 60 millones de pesos. Adorni argumentó que estas medidas generan un ahorro fiscal y mejoran la atención para los ciudadanos residentes. También citó ejemplos de Jujuy, Mendoza y Santa Cruz, donde se han implementado aranceles para extranjeros no residentes, ajustando los costos según el tipo de atención y la duración de la internación, con el objetivo de disuadir el uso no contributivo del sistema de salud por parte de extranjeros.
El vocero sostuvo que la reforma migratoria busca avanzar hacia un país más ordenado, cuidando sus fronteras y protegiendo a los ciudadanos argentinos. Argumentó que es injusto destinar recursos gratuitos a extranjeros que podrían estar recibiendo atención médica gratuita, restando recursos a quienes más lo necesitan. «Es poco justo que el Ejecutivo ponga gratuitamente la salud al servicio de un extranjero que viene en estos tours médicos, quitándole recursos a los argentinos que tienen necesidades y tal vez no tienen acceso a una prepaga», afirmó.
Finalmente, Adorni advirtió que se conocerán más detalles sobre la implementación de estas medidas a lo largo del país, especificando cómo se aplicarán en cada especialidad y requerimiento médico. Mientras tanto, el gobernador Kicillof y el ministro Kreplak continúan defendiendo la postura de mantener la atención médica gratuita para extranjeros en la provincia de Buenos Aires.