El Ministerio de Salud denunció ante la Justicia una serie de graves irregularidades detectadas en el Hospital Nacional Dr. Baldomero Sommer, ubicado en General Rodríguez, provincia de Buenos Aires. Según reveló el vocero presidencial Manuel Adorni, el Gobierno nacional, a cargo de la dirección del hospital, descubrió prácticas que van desde la existencia de una “financiera clandestina” hasta el manejo irregular de bienes y recursos estatales.
Según el vocero, la financiera estaría dirigida por la Asociación de Internados, que administraba de forma arbitraria los fondos destinados a los pacientes con enfermedad de Hansen (lepra). Este dinero, asignado a quienes participaban en trabajos terapéuticos, era retenido parcialmente y, en muchos casos, desviado para otorgar préstamos con tasas usureras. Además, el pago del peculio era controlado exclusivamente por la asociación, dejando fuera a las autoridades sanitarias y afectando directamente a los beneficiarios, quienes recibían montos menores o incluso no percibían lo correspondiente.
Uso de viviendas y alimentos
El uso irregular de las viviendas del hospital fue otro punto crítico de la denuncia. De las 192 casas disponibles en el predio, 62 estaban ocupadas por personas que no padecían la enfermedad de Hansen ni sus secuelas, muchas de ellas familiares de los directivos de la Asociación de Internados. Estas propiedades, destinadas a pacientes, habrían sido alquiladas sin autorización, violando el marco legal vigente establecido en el decreto 1382/2012.
El manejo de alimentos también evidenció serias irregularidades. La Asociación de Internados retiraba raciones adicionales sin justificación, representando un costo de $300 millones anuales para las finanzas del hospital. Asimismo, proveedores denunciaron que se les exigían sobornos para aceptar la entrega de productos como frutas y verduras. Y, en caso de negarse, la descarga de dichos insumos era bloqueada.
En las 300 hectáreas que rodean al hospital, se detectaron actividades económicas irregulares. Estas tierras, propiedad del Estado, estaban siendo utilizadas para la cría de ganado y cultivos agrícolas sin el consentimiento del hospital ni del gobierno nacional. Se descubrieron vacas y caballos cuya explotación generaba ingresos no declarados, controlados por la asociación.
Acciones adoptadas por el Gobierno
Para frenar estas prácticas, la nueva gestión implementó medidas inmediatas. El pago ahora se realiza directamente a cada paciente, previa acreditación de identidad, con un avance hacia su bancarización. Se suspendió la entrega de raciones extras de alimentos, lo que generó un ahorro significativo para el hospital. Además, se intensificaron los controles sobre el uso de las tierras y las viviendas en el predio.
El Ministerio de Salud está trabajando en la transición hacia un sistema de distribución de alimentos cocidos. De esta manera, se asegura que estén adaptados a las necesidades nutricionales específicas de los pacientes, a través de una licitación pública.
Historia y relevancia del Hospital Sommer
Fundado en 1941 como un sanatorio para pacientes con enfermedad de Hansen, el Sommer es la última institución de su tipo en Argentina. Desde 1993, amplió su atención a enfermedades de mediana y baja complejidad. Sin embargo, su gestión ha estado marcada por conflictos y denuncias administrativas.
La denuncia actual, que incluye pruebas documentales y testimonios, busca garantizar el uso adecuado de los recursos estatales y recuperar el control del hospital en beneficio de los pacientes y del sistema de salud.