La Unión Europea (UE) anunció este lunes un nuevo paquete de sanciones con el objetivo de debilitar la maquinaria bélica de Rusia y presionar a países aliados como China, Irán y Corea del Norte. Las medidas incluyen la sanción a funcionarios, entidades y 52 embarcaciones sospechosas de colaborar con Moscú, además de restricciones a empresas que facilitan el envío de materiales sensibles utilizados en drones y misiles.
Funcionarios y empresas en la mira
Entre las sanciones más destacadas, el bloque europeo congeló los activos de 54 personas y 30 entidades vinculadas a la invasión de Ucrania. Estas medidas afectan a funcionarios clave y empresas del sector energético y de defensa. Además, se prohíbe el ingreso a territorio europeo a varios individuos acusados de facilitar la logística militar rusa.
El ministro de Defensa de Corea del Norte, No Kwang Chol, y Kim Yong Bok, subjefe del Estado Mayor norcoreano, figuran entre los sancionados por colaborar en el envío de tropas y apoyo militar a Rusia. Asimismo, empresas chinas y rusas fueron incluidas por suministrar componentes electrónicos para drones y equipos bélicos.
Por otra parte, Bruselas sancionó a 52 embarcaciones sospechosas de transportar petróleo, gas y grano robado a Ucrania. Estos buques tendrán prohibido ingresar a puertos europeos y acceder a servicios esenciales, lo que busca limitar su operatividad y cortar una fuente clave de financiamiento ruso.
Sanciones a países aliados de Rusia
La UE también amplió su alcance hacia países aliados de Rusia como China, Irán, India y los Emiratos Árabes Unidos, acusados de ayudar a Moscú a evadir las sanciones. Estas naciones, según Bruselas, han facilitado el movimiento de materiales estratégicos utilizados en la fabricación de drones y misiles que Rusia despliega en Ucrania.
En este sentido, Kaja Kallas, jefa de política exterior de la UE, remarcó que “las sanciones también alcanzan a empresas chinas que suministran piezas críticas para el esfuerzo bélico ruso”. Además, aseguró que el bloque “continuará apoyando a Ucrania en todos los frentes: humanitario, económico, político, diplomático y militar”.
Coordinación con Estados Unidos
De manera paralela, se espera que el gobierno de Estados Unidos refuerce sus restricciones contra la industria petrolera rusa, uno de los pilares económicos del Kremlin. Aunque Washington ya prohíbe las importaciones de crudo ruso, evalúa sanciones adicionales a grandes consumidores como China e India, con el fin de reducir aún más los ingresos energéticos de Rusia.
Ambas potencias occidentales coinciden en que es clave cortar las fuentes de financiamiento del esfuerzo bélico ruso en Ucrania, y este paquete de sanciones busca generar un impacto directo en las arcas del Kremlin.
Desde el inicio de la invasión en febrero de 2022, la UE ha sancionado a más de 2.300 individuos y entidades relacionadas con la guerra, y estas nuevas medidas profundizan la presión internacional sobre Moscú y sus aliados.
Con estas acciones, el bloque europeo no solo endurece su postura frente a Rusia, sino que también envía un mensaje claro a los países y empresas que faciliten su maquinaria de guerra: el respaldo al Kremlin tendrá consecuencias económicas y políticas a nivel global.