El Gobierno Nacional, a través del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) Nº1104/24, anunció un incremento en el cálculo de recursos del Presupuesto Nacional por $2.149.126 millones y una reducción de gastos por $185.121 millones. Este ajuste implementado por Javier Milei busca fortalecer áreas estratégicas como Seguridad y Defensa, mientras disminuye partidas asignadas a programas de la ANSeS, lo que ha generado un impacto significativo en el diseño presupuestario.
La redistribución de los recursos incluye aumentos para 197 programas presupuestarios por $1.373.793 millones, principalmente en Seguridad y Defensa, y recortes en 32 programas, entre ellos algunos de la ANSeS, por $1.558.913 millones. Esto resultó en una mejora del resultado financiero del Presupuesto de $2.334.256 millones, según cálculos de la Asociación Argentina de Presupuesto (ASAP).
El gasto corriente disminuyó en $163.270 millones y el gasto de capital en $21.851 millones, destacándose incrementos en áreas estratégicas como Seguridad y Defensa, mientras se registraron recortes en prestaciones previsionales y otros programas sociales.
Modificaciones más significativas
Entre los ajustes más destacados, se encuentran cambios significativos en varias áreas. El Ministerio de Seguridad tuvo un aumento de $282.517 millones, con créditos destinados a la Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones de la Policía Federal y otras fuerzas de seguridad, incluyendo Gendarmería, Prefectura Naval y Policía Aeroportuaria. En el Ministerio de Defensa, el presupuesto se incrementó en $161.117 millones para atender gastos previsionales y operativos en el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea.
El Poder Judicial y el Ministerio Público también recibieron refuerzos presupuestarios de $124.025 millones y $37.027 millones, respectivamente, principalmente para gastos en personal. Por otro lado, el Servicio de la Deuda Pública experimentó una reducción de $600.000 millones, incluyendo disminuciones en los servicios de deuda en moneda nacional y extranjera.
Finalmente, el Ministerio de Capital Humano sufrió una reducción de $51.572 millones, afectando principalmente programas de la ANSeS, como Prestaciones Previsionales, Pensiones No Contributivas y la Pensión Universal para el Adulto Mayor, aunque se incrementaron fondos para Asignaciones Familiares y Seguro de Desempleo.
Enfoque en Seguridad y Defensa
Un componente central de los ajustes fue el fortalecimiento del presupuesto en áreas de seguridad, destacándose la asignación de recursos para atender necesidades previsionales y operativas de las fuerzas de seguridad. La Caja de Retiros, Jubilaciones y Pensiones de la Policía Federal recibió un incremento significativo para afrontar sentencias judiciales y atender jubilaciones.
Reducción en programas de la ANSeS
El recorte presupuestario en la ANSeS, justificado por supuestos inflacionarios superiores a los reales, impactó en programas clave como Prestaciones Previsionales y Pensiones No Contributivas. Estas reducciones han generado preocupación por su potencial efecto en los sectores más vulnerables.
El decreto refuerza áreas críticas para el Gobierno mientras ajusta gastos en sectores con menor prioridad dentro de su esquema de políticas públicas. Los incrementos en Seguridad y Defensa reflejan un enfoque estratégico en la operatividad estatal, mientras que los recortes en programas sociales podrían ser motivo de debate en los próximos meses. La medida muestra un intento por equilibrar las cuentas públicas, pero plantea interrogantes sobre sus implicancias sociales.