La Justicia Federal aceptó revisar el pedido de restitución en el cargo presentado por el exsenador nacional Edgardo Kueider, quien fue destituido por el Senado bajo el argumento de inhabilidad moral. Este nuevo capítulo judicial se da tras la apelación al fallo del juez federal Enrique Lavié Pico, quien el pasado viernes rechazó el amparo presentado por la defensa de Kueider. La Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal asumirá ahora la revisión del caso, con la intervención de la Sala V, integrada por los jueces Guillermo Treacy, Pablo Gallegos Fedriani y Jorge Alemany.
El equipo legal de Kueider, encabezado por el abogado Maximiliano Ruiz, planteó que la sesión en la que se votó su destitución estuvo viciada de irregularidades. Según el recurso presentado, la titular del Senado, Victoria Villarruel, presidió la sesión mientras ejercía de manera interina la Presidencia de la Nación, debido a la ausencia del mandatario Javier Milei, quien se encontraba en un viaje oficial a Italia. Para la defensa, esto supone una interferencia del Poder Ejecutivo en el Legislativo, violando principios constitucionales.
El juez Lavié Pico rechazó este argumento al considerar que la actuación de Villarruel no afectó el resultado de la votación. “La participación de la Dra. Victoria Eugenia Villarruel en su carácter de presidenta del Senado se limitó estrictamente al orden parlamentario y no tuvo injerencia alguna en el resultado de la votación”, subrayó en su fallo, citando los artículos 57 de la Constitución Nacional y 33 del Reglamento del Senado.
Apelación y argumentos renovados
Tras la decisión judicial, la defensa de Kueider presentó un extenso escrito de 57 páginas en el que insistió en la invalidez de la sesión y exigió que su cliente sea repuesto en su cargo. En el documento se destacó que el propio presidente Milei reconoció públicamente que la sesión podría considerarse inválida debido a la interferencia del Poder Ejecutivo. “Esta contradicción interna requiere claridad para la sociedad, y esa claridad solo puede provenir de la judicatura”, se afirmó en el escrito.
El Senado destituyó a Kueider, luego de que las autoridades de Paraguay lo detuvieran junto a su secretaria, en un intento de ingresar al país con 211 mil dólares sin declarar. El exsenador enfrenta cargos por tentativa de contrabando y se encuentra bajo prisión domiciliaria en el país vecino. Paralelamente, en Argentina enfrenta una causa penal por presunto cobro de coimas, que incluye allanamientos a sus despachos en el Senado y una solicitud de extradición presentada por la jueza federal Sandra Arroyo Salgado.
Este último expediente podría complicar aún más la situación de Kueider, ya que la magistrada rechazó su pedido de exención de prisión, dejando abierta la posibilidad de que enfrente el proceso detenido en Argentina.
Nueva instancia de revisión
La Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal será la encargada de revisar los argumentos de ambas partes y determinar si la sesión que votó la destitución de Kueider fue válida o si, como sostiene la defensa, incurrió en irregularidades. Este caso se presenta como un nuevo desafío para la Justicia, en un contexto político cargado de tensiones y con el ojo público atento al desenlace.