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POLÍTICA

Echaron al jefe y subjefe de la Policía de la Ciudad por la fuga de 17 presos de Liniers

Pablo Kisch y Jorge Azzolina fueron desplazados y Diego Casaló junto a la comisaria mayor Carla Mangiameli ocuparán sus cargos.

policía de la ciudad

Tras la fuga de 17 detenidos en la Alcadidía 9 en Liniers, el ministro de Seguridad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Waldo Wolff, tomó medidas drásticas. El dirigente decidió expulsar de sus cargos a los comisarios Pablo Kisch y Jorge Azzolina, jefe y subjete de la Policía de la Ciudad, quienes serán reemplazados por Diego Casaló y Carla Mangiameli, respectivamente.

Como si eso fuese poco, Wolff ya había decidido desplazar de sus cargos a Sebastián Vela, responsable civil del ministerio, y Martín Ochoa, director de Alcaidías de la Policía de la Ciudad. Esta fuga es la tercera que sucede en poco tiempo en CABA y consideran que el flojo trabajo de los mencionados funcionarios facilitaron las condiciones de escape para los detenidos.

«Confiamos en la conducción de nuestras fuerzas. Todos somos sujetos de análisis y examen permanente. No vamos a permitir que ocurran hechos de esta naturaleza», señaló el ministro porteño. El funcionario brindó una breve conferencia de prensa en la que anunció a las nuevas autoridades de la Policía de la Ciudad tras la fuga ocurrida esta mañana.

En este sentido, reconoció que «más allá de que hay un problema sistémico de que detenemos más gente, eso no quita que tenemos la obligación de preservar la seguridad de los vecinos y de cuidar los ámbitos donde están detenidos los delincuentes. No vamos a permitir bajo ningún concepto incapacidad ni connivencia», cerró.

Se fugaron 17 presos en Liniers

17 personas detenidas se escaparon de la Alcaidía 9 de Liniers. Los delincuentes hicieron un boquete, un agujero en la pared de ladrillo, para salir por un patio interno. De esta manera, y sin levantar sospechas, se fugaron del lugar. Este es el tercer caso de índole similar en la Ciudad de Buenos Aires, lo que llevó a tomar medidas drásticas sobre la cúpula de la Policía de la Ciudad.

Los otros casos sucedieron en Barracas a fines de noviembre, cuando 11 detenidos se escaparon, y otros dos se fugaron del Centro de Contraventores de Pompeya. Las causas de tantas fugas, según indican desde la fuerza de seguridad porteña, es la sobrepoblación carcelaria que hace que entre el hacinamiento y la poca cantidad de oficiales que deben cuidar de ellos sea difícil mantener el orden.

Este conflicto hace años que se viene trabajando en CABA para su modificación y ahora Waldo Wolff se comprometió a revertirlo. Sin embargo, tampoco pueden dejar de detener personas. El gran eje está en que muchas personas de la provincia de Buenos Aires delinquen en Capital Federal y se dan a la fuga, por lo que al momento de ser detenidos van a prisiones porteñas que se hacen cargo de ellos.