Fuertísimo fue todo lo que se escuchó en A la Tarde, el programa que lleva adelante Karina Mazzocco a través de la pantalla de América TV. Allí estuvo presente Guido Süller, quien habló sobre el distanciamiento con su hermana, Silvia Süller, quien también brindó su palabra.
«Estamos en Navidad, me acuerdo de las fiestas que hacíamos cuando éramos chicos, mi mamá, mi papá, todos los hermanos juntos. Eran épocas felices. Somos todos muy divertidos. Yo añoro un poco eso. A mí me sucedieron cosas a lo largo de la vida que me fueron quitando la felicidad. Con Silvia nunca pasó nada. Lo peor que pasó es que yo me metí en la televisión y ella me dijo ‘este es mi lugar, me estás sacando, me estás dejando sin trabajo'», lanzó él.
«Yo no tengo más relación con nadie desde que murió mi mamá. Es muy difícil ser hermano de Silvia. Ella no tenía un lugar para vivir y yo le di un cuarto de mi casa. Ella está despierta durante toda la noche y duerme de vida, es muy difícil convivir con una persona así. Para mí mis padres están vivos… Hoy 24 estoy super sensible porque me están pasando un montón de cosas», dijo entre lágrimas.
«A mi mamá la extraño… No tengo familia, estoy tratando de formar una nueva familia. Hoy la paso con Hernán, mi novio. Hace poco que estamos, me da vergüenza decirlo porque hay mucha diferencia de edad, pero para mí el amor no tiene ni género ni edad. Yo nunca más pude formar una familia. Yo soy un perdedor…», apuntó Guido Süller.
«Yo quedé en bancarrota. Ella se fue a tomar sol a Miami y me dejó con una deuda gigantesca. Ella se alquiló un piso en Miami y yo era el garante. No pagó, desapareció, apareció en Miami. Yo tuve que pagar los abogados, el alquiler de casi todo un año, las expensas…», dijo.
Cuando le comunicaron que iban a escuchar a Silvia Süller, él se mostró consternado. «Está temblando, pobre Guido», sostuvo Karina Mazzocco. «Yo no tengo por qué insultar a nadie… yo no tengo hermano. Esa persona que está ahí es una persona mitómana, un psicópata. Todo lo que dice es mentira. Si no que muestre mensajes, que muestre cosas… Para mí no existe más, para mí está muerto. Él me echó de la casa, se quedó con todos los muebles», aseveró ella. «Yo sufrí mucha violencia por parte de uno de mis hermanos. Yo lloraba, le pedía por favor a Guido, que me ayudara. ‘Ayudame, dame una mano, estoy sufriendo’, él me decía que ni loco», arremetió.
