El gobierno de Javier Milei dispuso un aumento del 2% en el precio del biodiésel , fijándolo en $1.085.887 por tonelada a través de la resolución 2/2025 de la Secretaría de Energía, publicada recientemente en el Boletín Oficial. Esta medida, que responde al marco establecido por la Ley 27.640 sobre Biocombustibles, será válida para las operaciones de enero de 2025 y hasta que se actualice nuevamente el valor.
El ajuste llega apenas un mes después de la última actualización, cuando en diciembre de 2024 el precio mínimo por tonelada se había establecido en $1.064.595. Según la Secretaría, esta medida busca corregir los desfasajes entre los costos de producción y los precios de comercialización, garantizando la estabilidad del mercado y evitando distorsiones en el precio del gasoil en los surtidores.
Impacto en los combustibles y el transporte
El biodiésel es un componente clave en la mezcla obligatoria con el gasoil, lo que lo convierte en un factor determinante en el costo del combustible que se ofrece al público. Este incremento podría traducirse en un leve aumento en los precios del gasoil en las próximas semanas, lo que generaría un impacto directo en sectores como el transporte y la logística.
La resolución también establece que el plazo de pago para el biodiésel no podrá exceder los 7 días desde la fecha de emisión de la factura. Esto podría beneficiar a los productores, asegurando mayor liquidez en el sector y evitando atrasos en los pagos.
Precios del bioetanol sin cambios
En contraste, el precio del bioetanol, otro biocombustible derivado de la caña de azúcar y el maíz que se utiliza para “cortar” las naftas, no fue actualizado para enero. Los valores actuales se mantienen en $703,804 por litro para el bioetanol a base de caña de azúcar y $645,061 por litro para el producido con maíz, según lo dispuesto en diciembre de 2024.
Aunque no se han realizado ajustes, se espera que la Secretaría de Energía evalúe próximamente una actualización en función de los costos de producción y las condiciones del mercado.
¿Cómo afecta al consumidor?
Si bien el incremento en el precio del biodiésel tiene como objetivo equilibrar las finanzas de los productores y evitar problemas en el abastecimiento, existe la posibilidad de que estos ajustes impacten gradualmente en los precios finales del gasoil y la nafta. Esto podría generar un efecto en cadena en sectores sensibles como el transporte, que depende directamente de estos combustibles.
Un escenario de precios dinámicos
En un contexto de alta sensibilidad económica, las actualizaciones de precios en los biocombustibles juegan un papel fundamental en el equilibrio del mercado energético. Este nuevo ajuste del biodiésel reafirma la intención del Gobierno de Javier Milei de mantener la sostenibilidad del sector, aunque el impacto en los surtidores será un tema clave a seguir en las próximas semanas.
La suba del precio del biodiésel refleja la necesidad de ajustar los costos de producción y evitar distorsiones en el mercado. Sin embargo, su posible efecto en el precio del combustible al público será un punto de atención para consumidores y productores por igual.
