La interna del PRO atraviesa una etapa de alta tensión, marcada por crecientes diferencias políticas entre sus dirigentes y un goteo de adhesiones hacia La Libertad Avanza (LLA). Sin embargo, el bloque de diputados nacionales presidido por Cristian Ritondo parece mantenerse unificado, al menos hasta el cierre de listas, según fuentes cercanas al espacio.
Aunque las divergencias dentro del partido liderado por Mauricio Macri son inocultables, desde el ala bullrichista –que concentra a una decena de diputados– aseguran que, por ahora, no habrá rupturas formales. «Estamos trabajando bien juntos. Hay diferencias, pero sería un error estratégico movernos ahora, ya que perderíamos espacios de poder en la Cámara y generaríamos un conflicto interno difícil de manejar«, señalaron fuentes del sector a la agencia NA.
El factor Bullrich y su vínculo con LLA
Patricia Bullrich, referente clave del PRO, ha trazado una línea divisoria con Macri al exigirle públicamente una definición sobre su postura: ¿se mantendrá del lado opositor o se acercará al oficialismo libertario? Si bien Bullrich parece alineada ideológicamente con “Las Fuerzas del Cielo” de Javier Milei, no ha dado señales claras de romper con el PRO, ni de ordenar a sus diputados que abandonen el bloque.
La prudencia estratégica es un factor determinante. En este momento, al Gobierno le resulta esencial contar con los votos del PRO para impulsar su agenda legislativa. En este marco, Bullrich busca evitar movimientos que generen un quiebre anticipado y compliquen su posicionamiento político.
En el esquema de poder interno del partido, Bullrich mantiene cierto control simbólico, reflejado en la inclusión del diputado Damián Arabia como vicepresidente segundo del PRO. Sin embargo, esta maniobra táctica parece haber quedado desfasada desde que la dirigente priorizó su acercamiento a LLA, considerando al PRO cada vez más debilitado.
Tensiones en Buenos Aires
En la provincia de Buenos Aires, el panorama refleja aún más la fragmentación interna. Dirigentes como Diego Santilli y Alejandro Finocchiaro trabajan abiertamente en pos de acuerdos electorales con el oficialismo libertario, en un intento por enfrentar a Axel Kicillof y Cristina Kirchner en el distrito más importante del país.
Incluso figuras emblemáticas del PRO como Fernando Iglesias, históricamente alineado con Macri, han cuestionado públicamente la estrategia de confrontación directa con Milei. Esto deja en evidencia la creciente división en torno al rumbo político que debe tomar el partido.
Ritondo: el equilibrio como consigna
En este contexto de fracturas y realineamientos, Cristian Ritondo enfrenta el desafío de mantener unido al bloque de diputados nacionales. Desde su entorno aseguran que, pese a las tensiones, existe un consenso para preservar la unidad hasta que se definan las candidaturas. «No creemos que la unidad esté en duda ahora, aunque con sus matices, seguimos trabajando juntos«, señalaron fuentes cercanas al titular del bloque.
El futuro del PRO parece estar en un punto de inflexión. Las decisiones que se tomen en los próximos meses no solo definirán la dinámica interna del partido, sino también su influencia en el escenario político nacional.
