La suspensión de TikTok en Estados Unidos llegó a su fin este domingo, marcando un hito en un conflicto político y legal que mantenía en vilo a millones de usuarios. Gracias a la intervención del presidente electo Donald Trump , la plataforma podrá continuar operando mientras se trabaja en un acuerdo que asegure su permanencia en el mercado.
En un comunicado oficial, TikTok expresó su gratitud a Trump por garantizar las condiciones necesarias para su regreso. La plataforma destacó que esta medida beneficia no solo a sus 170 millones de usuarios en Estados Unidos, sino también a más de 7 millones de pequeñas empresas que dependen de ella. La empresa calificó la acción como un triunfo para la Primera Enmienda y un rechazo a la censura arbitraria.
La disputa legal que casi apagó a TikTok
El conflicto comenzó meses atrás, cuando el Congreso aprobó una ley que exigía a TikTok desvincularse de su empresa matriz, ByteDance, con sede en China, por motivos de seguridad nacional. La plataforma se resistió, argumentando que la medida violaba sus derechos constitucionales, llevando el caso hasta la Corte Suprema.
El fallo del tribunal, emitido el viernes pasado, respaldó la prohibición, argumentando riesgos válidos relacionados con la recopilación de datos y la posible manipulación de contenido. Esto dejó a TikTok en una posición crítica, provocando su suspensión temporal el sábado por la noche.
Durante las horas de inactividad, los usuarios recibieron un mensaje que explicaba la situación, pero también mostraba optimismo ante las negociaciones lideradas por Trump para buscar una solución.
Trump, el mediador clave
El domingo por la mañana, Trump utilizó su red social para pedir a las empresas que no permitieran la inactividad de TikTok. Además, anunció su intención de emitir una orden ejecutiva el lunes, una vez asumido el cargo, para extender los plazos legales y garantizar la operación de la plataforma.
Entre las propuestas del mandatario está la creación de una empresa conjunta con participación estadounidense, lo que podría resolver las preocupaciones de seguridad y al mismo tiempo permitir que TikTok continúe funcionando.
Este gesto de Trump contrasta con la postura de la administración saliente de Joe Biden, que había optado por no implementar la prohibición en sus últimos días. Según fuentes, la tensión entre ambas administraciones quedó en evidencia durante el manejo de la crisis.
TikTok ahora enfrenta el reto de colaborar con el gobierno entrante y demostrar su compromiso con la seguridad de los datos de los usuarios estadounidenses. La plataforma aseguró que trabajará en un plan a largo plazo que permita superar las diferencias y garantizar su permanencia.
La suspensión de TikTok en Estados Unidos se traduce en perdidas millonarias. Con esta acción, TikTok no solo restaura su servicio, sino que refuerza su relevancia en el ecosistema digital de Estados Unidos. Usuarios y pequeños empresarios celebran su regreso, mientras el debate sobre su futuro sigue abierto.
