El Gobierno nacional confirmó la entrega de un bono extraordinario previsional de hasta $70.000 para jubilados y pensionados con menores ingresos. El beneficio se abonará en febrero, según lo dispuesto en el Decreto 47/2025, publicado en el Boletín Oficial.
La medida busca mitigar la pérdida del poder adquisitivo de los adultos mayores tras los efectos de la anterior Ley de Movilidad Jubilatoria, que no contemplaba la variación inflacionaria. Con esta iniciativa, el Ejecutivo pretende brindar alivio a quienes perciben los haberes más bajos.
¿Quiénes recibirían el bono extraordinario?
El bono está destinado a los titulares de prestaciones previsionales de la ANSeS. Esto incluye jubilaciones, pensiones contributivas y no contributivas, la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) y las pensiones por vejez, invalidez o para madres de siete hijos o más.
Aquellos jubilados y pensionados que perciban un haber igual o inferior al mínimo garantizado recibirán el bono completo de $70.000. En tanto, quienes superen ese monto tendrán un bono parcial, cuyo valor se ajustará para que el total recibido alcance el haber mínimo más el bono extraordinario.
¿Qué establece el decreto del Gobierno nacional?
El decreto establece que el bono no será computable para otros conceptos ni estará sujeto a descuentos. Además, en el caso de pensiones con más de un beneficiario, se considerará un único titular para la percepción del beneficio.
La Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSeS) será la encargada de implementar la medida. También tendrá la responsabilidad de dictar las normas aclaratorias y complementarias necesarias para garantizar su correcta aplicación.
Esta medida se enmarca en el contexto económico actual, donde la inflación afecta con mayor fuerza a los sectores vulnerables. El bono extraordinario representa un refuerzo para mejorar la situación de los jubilados y pensionados con menores ingresos, quienes han visto deteriorado su poder adquisitivo en los últimos meses.
Desde el Gobierno argumentan que este refuerzo es una respuesta a la necesidad urgente de protección social, mientras se evalúan nuevas estrategias para actualizar los haberes jubilatorios de manera más equitativa.
El pago del bono en febrero marca un nuevo esfuerzo por contener el impacto de la crisis económica en uno de los sectores más golpeados por la inflación. Se espera que la medida brinde un alivio temporal a millones de jubilados y pensionados en todo el país.
Otras medidas para jubilados y pensionados
Además del bono extraordinario, el Gobierno evalúa otras iniciativas para mejorar la situación de los jubilados. Se baraja la posibilidad de implementar un nuevo esquema de movilidad jubilatoria que contemple ajustes más frecuentes en función de la inflación.
Por otro lado, se estudian descuentos en medicamentos y tarifas de servicios públicos para jubilados de bajos ingresos. Estas medidas complementarían el refuerzo económico y buscarían aliviar el impacto del contexto económico en la vida cotidiana de los adultos mayores.
Mientras tanto, organizaciones de jubilados y pensionados continúan reclamando aumentos estructurales en los haberes y una política de actualización que garantice el mantenimiento del poder adquisitivo a largo plazo.
