El presidente Javier Milei vuelve a ser protagonista en la escena internacional. La prestigiosa revista británica The Economist le dedicó nuevamente su portada, destacándolo como un referente global en la lucha contra la burocracia y la sobrerregulación estatal. En su edición más reciente, el semanario incluyó a Milei junto al expresidente estadounidense Donald Trump y el primer ministro indio Narendra Modi como líderes que impulsan reformas de desregulación a gran escala.
En un artículo titulado La revuelta contra la regulación, The Economist elogió la gestión del presidente argentino por aplicar una drástica reducción del intervencionismo estatal en la economía y lo presentó como un modelo a seguir para otros países. “Milei ha empuñado una motosierra contra las regulaciones argentinas”, señaló el artículo, en referencia a la icónica metáfora del libertario sobre su plan de reformas.
Milei, Trump y Modi: la ola desreguladora global
El semanario británico analizó una tendencia mundial hacia la reducción del aparato regulador del Estado y ubicó a Milei como uno de los principales exponentes de este cambio de paradigma. “Desde Buenos Aires y Delhi hasta Bruselas y Londres, los políticos han prometido recortar la maraña burocrática que asfixia a la economía”, afirmó el medio.
El artículo subrayó que la desregulación, si se lleva a cabo con precisión, puede generar mayor libertad económica, crecimiento más acelerado, precios más bajos y el desarrollo de nuevas tecnologías. Como ejemplo, citó el caso argentino y aseguró que, bajo la gestión de Milei, el país comenzó a recuperarse económicamente. Además, destacó que la apertura del comercio exterior y la eliminación de regulaciones han permitido que algunos productos importados reduzcan sus precios hasta un 35%.
Sin embargo, The Economist advirtió sobre los riesgos de una desregulación mal implementada. En el caso de Trump, por ejemplo, alertó que su enfoque podría afectar negativamente a la economía si desmantela sin control funciones esenciales del gobierno.
El exceso de regulaciones y su impacto en la economía
El informe de The Economist abordó el impacto negativo de la sobrerregulación en diversas economías del mundo. Según el análisis, “los estadounidenses dedican un total de 12.000 millones de horas al año a cumplir con regulaciones federales”, entre las que mencionó normativas sobre la comercialización de miel y estándares de inflamabilidad de pijamas infantiles.
En Europa, el artículo destacó que el Parlamento ha aprobado más del doble de leyes que Estados Unidos en los últimos cinco años, lo que ha ralentizado el crecimiento económico. Además, mencionó que en el Reino Unido las normativas ambientales han incrementado los costos y generado demoras en la construcción de infraestructura. “Las reglas bien intencionadas que protegen a murciélagos, tritones y hongos raros contribuyen a obstruir, retrasar y encarecer las obras”, ironizó el medio.
Si bien The Economist reconoció que en ciertos casos las regulaciones pueden ser necesarias —como en materia de seguridad en internet o normas ambientales—, remarcó que el exceso de normativas suele tener consecuencias perjudiciales. “En gran parte del mundo desarrollado, construir cualquier cosa se ha vuelto una tarea desalentadora, lo que mantiene altos los precios de las viviendas”, afirmó. También resaltó que la burocracia ha generado sobrecostos en la construcción de rutas y ha paralizado proyectos de extracción de minerales estratégicos en Estados Unidos.
Los desafíos de la desregulación
El artículo de The Economist destacó que la reducción de regulaciones puede ser altamente beneficiosa si se ejecuta con planificación y estrategia. Como ejemplos de éxito, mencionó a Margaret Thatcher en el Reino Unido, las reformas pro-mercado implementadas en India en la década de 1990 y los cambios recientes en el sur de Europa. “Todos estos casos impulsaron el crecimiento económico tras la eliminación de barreras regulatorias”, subrayó el medio.
Respecto a la gestión de Milei, la revista destacó que su equipo de gobierno “llegó al poder después de haber pasado 18 meses estudiando cómo extraer al gobierno de áreas en las que no debía estar”. También elogió la velocidad con la que se aplicaron las primeras reformas desregulatorias en Argentina.
No obstante, The Economist también advirtió sobre los desafíos de este modelo. “El reto es cómo ser audaz sin ser imprudente”, señaló el artículo. En el caso de Trump, alertó que si su administración avanza con recortes indiscriminados en el Estado y congela programas sin un criterio claro, podría generar un impacto negativo en la economía.
Por otro lado, el semanario británico criticó la falta de ambición en la desregulación dentro de la Unión Europea. Según el artículo, la timidez de los gobiernos europeos en materia de reformas ha frenado el crecimiento económico y ha impedido que los cambios regulatorios tengan un impacto significativo en la competitividad global.
El modelo Milei y su impacto internacional
Finalmente, The Economist concluyó que tanto Estados Unidos como Europa enfrentan desafíos distintos en términos de regulación estatal. En el caso de Estados Unidos, recomendó adoptar una planificación más detallada para llevar adelante reformas regulatorias sin generar caos en la administración pública. En Europa, sugirió que los gobiernos deberían impulsar con mayor determinación la reducción de trabas burocráticas que afectan la actividad económica.
“Milei demuestra que la desregulación no solo es posible, sino que puede generar cambios positivos en la economía cuando se ejecuta con determinación y estrategia”, concluyó el artículo.
