El Galatasaray tomó una decisión que podría tener impacto directo en el futuro de Mauro Icardi. Mientras el delantero argentino continúa su recuperación de la lesión de ligamentos que sufrió a fines de 2024, el club turco concretó el fichaje de Álvaro Morata, un refuerzo de jerarquía que pone en duda el rol del goleador argentino cuando esté nuevamente disponible.
El atacante español de 32 años llega al equipo en calidad de cedido, con una cláusula de compra obligatoria fijada en 15 millones de euros para junio, según informó el diario Marca. Su arribo se suma a la presencia de Victor Osimhen, máximo goleador del equipo con 12 tantos en 15 partidos, y Baris Alper Yilmaz, otro de los atacantes destacados del líder de la Superliga turca. Además, recientemente Galatasaray invirtió 6 millones de dólares en el fichaje del joven Ahmed Kutucu.
Este panorama deja abierta la incógnita sobre el lugar que ocupará Icardi cuando regrese a las canchas. Si bien tiene contrato hasta 2026, la relación entre el delantero y la institución ha pasado por momentos tensos, en especial desde que decidió realizar la primera parte de su recuperación en Argentina, algo que no fue bien visto por la directiva turca.
La recuperación de Icardi y el impacto del fichaje de Morata
El argentino sufrió en noviembre de 2024 una rotura de ligamento cruzado anterior y daño en los meniscos de su rodilla derecha, lo que lo obligó a someterse a una operación. Su tiempo de recuperación fue estimado en ocho meses, lo que llevaría su regreso a julio o agosto de este año.
Sin embargo, la incorporación de Morata podría condicionar su futuro en el club. Aunque existen rumores sobre una posible salida de Osimhen a la Juventus, lo cierto es que Galatasaray ya suma una gran cantidad de delanteros de jerarquía.
El médico del club, Yener Ince, intentó calmar las aguas y aclaró la situación: “Hablo con Icardi y con su médico todos los días. En otros equipos, el periodo de vuelta de los futbolistas con la misma lesión es de 8-9 meses. Puede volver en 6 meses, pero no tendría sentido. Sería arriesgado. Es un proceso normal. Tenemos vídeos del entrenamiento de cada día. Trabaja por su cuenta. No tenemos un problema de comunicación”, aseguró al diario Milliyet.
Mientras tanto, en Turquía se mantienen las dudas sobre el futuro de Icardi. Aunque el goleador fue clave en la última Superliga con 25 goles, su lugar en el equipo está en entredicho con la llegada de Morata. La decisión final dependerá de su recuperación y de cómo el club estructure su delantera de cara a la próxima temporada.