El Gobierno confirmó que más de 41.000 empleados públicos fueron desvinculados a lo largo del primer año de gestión de Javier Milei. La medida responde a la política de ajuste del gasto público impulsada por la administración libertaria y se enmarca dentro de la reducción del Estado como una de las principales banderas del oficialismo.
El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, fue el encargado de difundir los datos actualizados sobre la disminución del empleo público. A través de su cuenta de X, detalló que entre diciembre de 2023 y enero pasado, unas 41.142 personas perdieron su trabajo en el sector estatal.
Según la información oficial, la reducción del personal se compone de bajas en la Administración centralizada y descentralizada (23.576), en Empresas del Estado (13.161) y en el ámbito del Personal Militar y de Seguridad (4.405). Sturzenegger celebró la medida y sostuvo que «seguimos adecuando el tamaño del Estado luego del exceso de ñoquis, militancia y duplicaciones del kirchnerismo».
Protestas y rechazo sindical
La publicación de los datos sobre despidos se produjo en medio de protestas encabezadas por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE). El gremio se manifestó contra «la reciente ola de despidos y el recorte salarial en todos los sectores laborales» y exigió la reincorporación de los trabajadores afectados.
Esta semana, ATE llevó adelante movilizaciones en distintos organismos públicos, entre ellos, el Instituto Social Militar Dr. Dámaso Centeno, la sede central de la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo (ACUMAR) y el ex Ministerio de Desarrollo Social. Los dirigentes sindicales alertaron sobre el impacto de los despidos en el funcionamiento del Estado y en la situación social del país.
El secretario general del sindicato, Rodolfo Aguiar, denunció que «con los despidos masivos y el recorte de salarios, nos conducen a una catástrofe social». Además, señaló que «con este presidente y sus ideas, el Estado está muy lejos de articular el bien común y promover el desarrollo humano». En esa línea, advirtió que «todo el tejido social se está resquebrajando y el entramado productivo destruyendo».
Plan de lucha sindical
Ante el ajuste en el sector público, ATE adelantó que convocará a un Plenario Federal de Delegados la próxima semana. En ese encuentro, el sindicato definirá la continuidad del plan de acción y evaluará la posibilidad de llevar adelante una nueva huelga general.
Además, desde el gremio remarcaron que exigirán la reincorporación inmediata de los empleados cesanteados en el Ministerio de Capital Humano, Acumar y otros organismos estatales afectados por la decisión del Gobierno.
Mientras tanto, la administración de Javier Milei continúa con su política de reducción del gasto público. Desde el oficialismo sostienen que el ajuste en el Estado es clave para lograr el equilibrio fiscal y bajar la presión impositiva. Sin embargo, el impacto social de las medidas sigue generando un fuerte rechazo entre los sectores sindicales y trabajadores afectados.
Seguimos adecuando el tamaño del Estado luego del exceso de ñoquis, militancia y duplicaciones del kirchnerismo. La motosierra es pilar del equilibrio fiscal y permite bajar impuestos. Gracias @JMilei. VLLC! pic.twitter.com/G7ID1G2aLa
— Fede Sturzenegger (@fedesturze) March 6, 2025
