La Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA), fiscalía especializada en casos de corrupción, abrió un expediente para indagar sobre el presunto ingreso irregular de valijas a través de un vuelo privado procedente de Miami. El hecho, ocurrido el 26 de febrero, involucra a Laura Belén Arrieta, una joven que arribó al país en una aeronave privada y cuyo equipaje, según versiones periodísticas, no habría sido sometido a controles aduaneros por órdenes de altos funcionarios.
Las sospechas surgieron a partir de una denuncia mediática realizada por el periodista Carlos Pagni en su programa Odisea Argentina, donde reveló que la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y la Aduana habrían recibido una instrucción para no revisar las valijas transportadas en el vuelo. Desde entonces, se conocieron más detalles sobre la pasajera y su vínculo con el empresario Leonardo Scatturice, radicado en Miami y ligado al mundo del espionaje. Scatturice también organizó, junto con Arrieta, la conferencia conservadora CPAC en Buenos Aires, evento que contó con la participación del presidente Javier Milei.
Las primeras medidas de la PIA
La fiscalía no solo inició la investigación de oficio —es decir, sin mediar una denuncia formal—, sino que ya ordenó las primeras medidas de prueba. Entre ellas, solicitó los registros de las cámaras de seguridad del hangar donde permaneció la aeronave entre el 26 de febrero y el 5 de marzo, además de la lista de pasajeros y tripulantes del vuelo. También pidió informes a la PSA, la Dirección General de Aduanas, la Dirección Nacional de Migraciones y la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) para obtener detalles sobre el itinerario y el equipaje declarado.
Según Pagni, fuentes de la Aduana confirmaron que el operativo de control fue interrumpido por una orden superior que impidió la inspección del equipaje.
Los antecedentes de la pasajera y el empresario vinculado al Gobierno
Arrieta, oriunda de Lanús, trabajó en dos aerolíneas comerciales y recibió formación como azafata y tripulante de aviación ejecutiva en Buenos Aires. Actualmente, figura como empleada de OCP Tech, una empresa especializada en soluciones tecnológicas con operaciones en Argentina y Miami, y de COC Global Enterprise, propietaria del avión en el que viajó.
Scatturice, dueño de ambas compañías y con múltiples sociedades registradas, ha intentado —hasta ahora sin éxito— obtener la ciudadanía estadounidense. Su nombre cobró relevancia tras conocerse que, a través de CPAC, facilitó el acceso de Milei al expresidente Donald Trump.
El vuelo bajo sospecha
El avión en cuestión es un Bombardier Global 5000 con matrícula estadounidense (N18RU). Según el plan de vuelo, la aeronave permaneció en Aeroparque durante siete días antes de partir hacia Francia con una escala en Tenerife.
La investigación de la PIA es la primera acción concreta para esclarecer este caso, más allá del expediente interno que el Gobierno aseguró haber iniciado en la Aduana. La fiscalía, liderada por Sergio Rodríguez, actúa como un organismo especializado en la detección de irregularidades y actos de corrupción dentro de la Administración Nacional.
Con esta investigación en marcha, la fiscalía intentará determinar si efectivamente existió una orden para evitar los controles y si hay funcionarios involucrados en una maniobra irregular para favorecer el ingreso de equipaje sin fiscalización.