Jorge Rial advirtió en C5N sobre la complicada situación que atraviesa Bahía Blanca, una ciudad que todavía no logra recuperarse de la reciente catástrofe climática. A pesar de que el interés mediático ha ido disminuyendo con el paso de los días, los vecinos siguen enfrentando dificultades y ahora se suma una nueva amenaza: fuertes tormentas que podrían agravar el panorama.
«Pasaron apenas unos quince días de la catástrofe en Bahía Blanca, una ciudad que todavía no se recuperó, que lamentablemente, mientras pasan los días va mermando el interés de los medios, pero ahora estamos yendo», expresó Jorge Rial, poniendo el foco nuevamente en la crítica situación del lugar.
Las autoridades han emitido una alerta amarilla debido a las condiciones climáticas adversas. «Lamentablemente hoy se anunciaban nuevas lluvias y, ante la alerta amarilla, ya se suspendieron las clases, el transporte público y la entrega de ayuda», informó el periodista, dejando en evidencia la gravedad del pronóstico. Según los especialistas, «va a haber tormentas de intensidad muy fuerte, chaparrones intensos, vientos de hasta 70 km por hora y hasta caída de granizo», lo que genera gran incertidumbre entre los habitantes.
La preocupación de la gente es evidente. «La gente está muy asustada», señaló Rial, reflejando el temor de los vecinos ante la posibilidad de un nuevo desastre. Aunque la cantidad de lluvia esperada no sería tan extrema como en la última tormenta, hay dudas sobre la capacidad del sistema de drenaje de la ciudad. «No se sabe cómo están los drenajes, si están tapados. No se sabe cómo va a reaccionar el sistema, es una lluvia considerable pero no es excesiva», explicó el conductor.
Las consejos para los habitantes de Bahía Blanca
Ante este panorama, se han emitido recomendaciones para minimizar riesgos. «Piden que la gente no salga si no tiene cuestiones de mucha necesidad, que no se saque basura y que no obstruyan los desagües», detalló Jorge Rial, advirtiendo sobre la importancia de estas medidas preventivas.
El fenómeno climático que amenaza Bahía Blanca proviene del sur del país. «La lluvia viene del sur, desde Chubut. Entonces, máxima precaución, ojalá que no sea nada», concluyó Rial, deseando que la tormenta no cause estragos en una ciudad que aún se encuentra en plena recuperación.
Con la incertidumbre en aumento, los habitantes de Bahía Blanca permanecen atentos a la evolución del clima, esperando que esta vez las lluvias no causen nuevos daños y que la ciudad pueda finalmente comenzar su proceso de reconstrucción.
