Se produjo un momento de conmoción en A24 tras lo que Marina Calabró tuvo que comunicar en su programa informativo. Sucede que la animadora repasó las declaraciones de Verónica Ojeda en el juicio por la muerte de Diego Maradona y sacó a la luz algunos detalles impactantes.
«Verónica Ojeda fue interrogada varias horas, visiblemente conmocionada, tenía que hablar lo que vio en las horas finales de Diego Maradona», expresó primero frente a las cámaras de A24. Luego, Calabró repasó algunos de los dichos de Ojeda que resonaron.
«Son detalles muy tristes», admitió Calabró y leyó las declaraciones textuales de la blonda: «‘La última vez que fui a la casa la cocina estaba sucia. No estaba en condiciones, donde estaba Diego había olor a pis, a caca, no lo higienizaban. Entré a verlo, estaba desfigurado, esa última vez que lo vi que con vida, me fui muy mal’«.
Fuerte relato
Al igual que sus colegas en A24, Jorge Rial también habló de lo ocurrido con Diego Maradona y dejó clara su postura sobre el caso. “Es importante la declaración de Verónica Ojeda porque ella conoce la última parte de la internación de Diego Maradona. Lo que vivió en el country que murió”, expresó Rial, haciendo referencia al testimonio de la ex pareja del Diez, quien fue una de las pocas personas presentes en sus últimos días.
Jorge Rial también repasó cronológicamente el proceso médico de Maradona: “Ingresa por un cuadro de anemia a un centro médico de La Plata, descubren que tenía un hematoma en la cabeza, luego lo operan, sale del postoperatorio y hay que decidir dónde internarlo”.
En ese punto, el colega de la periodista de A24 reveló que hubo un audio clave donde se escucha a familiares, allegados y profesionales de la salud tomando decisiones determinantes. “A lo que hace referencia el audio es la reunión que hicieron los allegados, familiares y médicos, en los que deciden que no vaya a un centro médico. En el audio están todos decidiendo el destino de Diego Maradona”, explicó y añadió: «Eran pésimas las condiciones, vivía en un living con una mampara, la internación domiciliaria era calamitosa”.