En una nueva emisión de su clásico programa en Canal Trece, Mirtha Legrand reunió a destacadas figuras del medio para debatir sobre los cambios en la televisión argentina. En una mesa cargada de reflexiones, la conductora y sus invitados analizaron la creciente presencia de vulgaridad en los medios y lamentaron el rumbo que ha tomado parte del entretenimiento actual.
La primera en poner el tema sobre la mesa fue Susana Roccasalvo, quien no dudó en señalar: «Se hizo más fuerte la cosa vulgar», en referencia a la evolución de ciertos contenidos televisivos. Sus palabras encontraron eco rápidamente en Mirtha Legrand, quien expresó su preocupación con una contundente afirmación: «Terrible, no me quiero hacer la ingenua. Antes se registraba eso. Veo mucha televisión y me horroriza las cosas que escucho».
El debate continuó con ejemplos concretos y críticas a algunas figuras reconocidas. Susana Roccasalvo fue aún más precisa: «También se ve en conductores de noticieros muy prestigiosos y me da lástima porque los veo. La vulgaridad se aplica». La periodista lamentó que incluso en espacios considerados serios, se haya perdido el cuidado en el lenguaje y las formas.
Durante la charla, Roccasalvo también compartió una confesión personal acerca de su voz y su adicción al cigarrillo: «Yo me encargué de destruir mi voz con el cigarrillo, sigo fumando pero menos. Lo dejé una vez, pero aumenté casi quince quilos». Esta revelación generó empatía en la mesa, donde se abordó también el esfuerzo que implica dejar ciertos hábitos.
Mirtha Legrand, por su parte, rememoró sus propias dificultades con el cigarrillo: «Me costó, es horrible eh, me ponía una servilleta», relató entre risas, recordando una anécdota sobre su intento de abandonar el tabaco.
Un debate que deja reflexión
El programa de Mirtha Legrand no solo ofreció entretenimiento, sino también un análisis profundo sobre cómo la televisión ha cambiado con el paso de los años. Tanto Mirtha como Susana Roccasalvo coincidieron en la necesidad de recuperar ciertos valores tradicionales, como el respeto y la elegancia, frente a un panorama mediático cada vez más permisivo. Una vez más, la «Chiqui» demostró su vigencia, generando un espacio de reflexión que fue muy comentado en redes sociales y portales de noticias.