Desde que entró a la casa de Gran Hermano 2025, Alberto «El Pestañas» se encontró con un escenario difícil de digerir en torno a su relación con Luz Tito. En este sentido, todo fue para peor, cuando la jujeña sufrió un lapsus y confundió a su pareja con Santiago Algorta. Posteriormente, ambos tuvieron una dura charla, donde el español admitió que no estaba seguro de sus sentimientos por Luz.
A través de la última emisión de Gran Hermano 2025, “El Pestañas” aseguró que la persona que realmente la acompañará ahora será “Tato”. En este aspecto, expresó: «Santi siempre ha sido un gran apoyo aquí. Se le nota que va a ser tu apoyo acá en el futuro». Rápidamente, Luz no dudó en formular la pregunta clave de la conversación: «¿No estás más enamorado de mí?».
Posteriormente, el español respondió con una pregunta retórica que derivó en la peor situación en Gran Hermano 2025. Además, formuló: «¿Qué es estar enamorado?». Acto seguido, Luz respondió: «Que me elijas en tu vida, querer que sea yo tu compañera». No obstante, Alberto tuvo la más temida sinceridad: «No sé si estuve enamorado alguna vez».
«No merecía que la trataran así»: Ulises apuntó contra Katia en Gran Hermano 2025
Gran Hermano 2025 cambió con la entrada de los familiares de cada uno de los jugadores. En este sentido, los participantes reaccionaron de forma diversa a la entrada de sus afectos. Sin embargo, Katia “La Tana” tuvo una dura discusión con su prima y esto desencadenó una noche cargada de polémica en la casa. Finalmente, Ulises Apóstolo se refirió a lo sucedido y criticó a su compañera.
Concretamente, Ulises opinó de la pelea de Katia con su prima y lo que generó en Gran Hermano 2025. En este aspecto, expresó: «Está mal maltratar a alguien. Está mal que invites a alguien y luego lo trates mal. La visita tiene que saber ubicarse igual, estar consciente del aislamiento que sufrimos nosotros, no es venir a una casa normal acá».
Posteriormente, Ulises defendió a Gisela, la prima de Katia, y aseguró que nadie merece ser tratado así en Gran Hermano 2025. Además, manifestó: «Si a la visita se le dice que baje el perfil y no lo hace, está el problema de el que está acá adentro, quiere brillar solo y el de que la visita no entienda el aislamiento. Eso se mezcla y es un combo explosivo. Gisela no merecía que la trataran así. Es ubicada y no vino para hacer de acompañante terapéutico».
