Una nueva encuesta mostró que la inflación en la Argentina volvió al tope de las preocupaciones sociales de los argentinos. El 21,7% de los encuestados mencionó la suba de precios como su mayor inquietud, muy por encima del 17% que señaló a la inseguridad y a la corrupción como sus principales problemas.
El sondeo de opinión fue realizado por la consultora Management & Fit y muestra una fuerte disociación entre los números oficiales y la percepción social: aunque el Gobierno afirma que bajó la pobreza, el 66,6% de la gente cree que no es así. Y solo un 26,8% considera que la situación económica actual es «positiva». La expectativa de mejora también cayó: apenas un 46,5% cree que la economía mejorará, 1,7 puntos menos que el mes anterior.
Ante ese escenario, el Gobierno de Javier Milei tomó una decisión clara: congelar la economía. Con el objetivo de llegar a las elecciones de octubre con índices más bajos, mantiene atrasado el tipo de cambio oficial, presiona a las alimenticias para que no aumenten y obliga a YPF a bajar los precios de los combustibles, pese al encarecimiento internacional del petróleo. También desalienta la reapertura de paritarias, para evitar subas salariales que retroalimenten el consumo y los precios.
El mensaje de Luis Caputo para disipar los rumores de devaluación
El ministro de Economía, Luis Caputo, sostiene que la inflación está bajando y que «va a colapsar». En un reciente encuentro con empresarios del sector financiero, pidió «sacarse de la cabeza el chip de que la Argentina es lo mismo de siempre» y aseguró que la mayoría de los empresarios y comerciantes tuvo que «retrotraer los precios» por la expectativa de una devaluación tras la salida del cepo que nunca llegó.
En esa línea, Caputo también celebró que Argentina «ya no esté regalada en dólares» y relativizó el aumento del turismo al exterior. Dijo que «es de locos pensar que alguien de clase media veraneando en Brasil es un lujo», ignorando que la escapada se da, entre otras cosas, porque los precios locales están entre los más caros del mundo. Según el INDEC, el turismo emisivo creció 74% interanual en el último dato disponible, incluso antes de la salida del cepo.
La inflación en alimentos no cede en abril
Sin embargo, los precios no acompañan el optimismo oficial. La consultora Econviews midió en la última semana de abril un alza del 0,5% en alimentos, con subas del 0,6% en carne y almacén, y 0,5% en bebidas. Solo una caída del 1,2% en verduras logró amortiguar el dato semanal. En un contexto donde el consumo sigue cayendo, los precios se mantienen firmes, especialmente en rubros básicos.
Ante este panorama, volvió a hablar Marco Lavagna, titular del INDEC, y sugirió una posible modificación en la forma de medir la inflación. La idea sería que los servicios pesen más y los alimentos menos. El cambio, más que técnico, parece político: mostrar una baja en el índice general sin que eso implique una mejora real en la mesa de los argentinos. Una solución cosmética a un problema estructural.






