La cosecha de yerba mate tuvo una caída de más del 30% entre enero y marzo de este año. El dato generó alarma en el sector, sobre todo en Misiones y Corrientes, las provincias que concentran la mayor parte de la producción. En muchas zonas, directamente no se cosechó. Los productores explicaron que los precios actuales no alcanzan para cubrir los costos básicos.
Hoy, el kilo de hoja verde se paga entre $230 y $300, un valor que no permite sostener ni la logística ni la mano de obra. A eso se suman condiciones de pago que terminan de desalentar la actividad: plazos de hasta 90 días o esquemas en 12 cuotas sin interés. Para muchos, seguir produciendo no solo es inviable, sino insostenible.
Caída en las ventas internas y presión sobre el sector
La crisis no solo golpea desde el lado de los costos. El consumo de yerba mate también cayó con fuerza. Durante 2024, las ventas internas bajaron un 11%, según datos del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM). Se comercializaron 238 millones de kilos, lo que representa una pérdida de casi 25 millones frente al año anterior. Es el nivel más bajo desde 2016.
El dato refleja un retroceso preocupante para una economía regional que depende de esta actividad. La inflación y la pérdida de poder adquisitivo redujeron el consumo en hogares, y eso termina impactando directamente en toda la cadena productiva.
Exportaciones en baja en el arranque de 2025
Las exportaciones de yerba mate también comenzaron el año con números negativos. En lo que va de 2025, se registró una caída de entre el 15% y el 16% respecto al mismo período del año anterior. Esta tendencia genera inquietud, sobre todo porque el 2024 había cerrado con un récord de exportaciones: más de 41 millones de kilos, un 13% más que en 2023.
Ese crecimiento había sido uno de los pocos datos alentadores del último año. Pero el freno en los envíos al exterior confirma que el panorama general es complejo y sin señales de recuperación inmediata.
Aunque desde el INYM aún no publicaron proyecciones oficiales, los productores aseguran que la situación no va a cambiar si no mejoran los precios de la yerba mate y las condiciones de comercialización. Muchos ya anticipan que podrían dejar de producir si no hay medidas urgentes.La falta de rentabilidad está llevando a una parálisis en el interior de Misiones y Corrientes. Y mientras los costos siguen en alza, la yerba mate enfrenta uno de sus peores momentos de los últimos años.