La derrota histórica del PRO en la Ciudad de Buenos Aires dejó secuelas y abrió una feroz interna dentro del partido que alguna vez fue el bastión del macrismo. El tercer puesto de Silvia Lospennato, con apenas el 16% de los votos, detrás del peronismo y del candidato libertario Manuel Adorni, encendió todas las alarmas. Y el que no tardó en disparar fue el ex asesor estrella de Mauricio Macri, Jaime Durán Barba, quien lanzó durísimas críticas al expresidente y sentenció su rol en la política actual.
En declaraciones a Canal E y Net TV, el consultor ecuatoriano fue tajante: “Si las ideas de La Libertad Avanza son las correctas, que Macri se afilie al partido y se deje de jorobar”. Su frase resumió el sentir de muchos dentro del PRO, que observan con creciente preocupación cómo su espacio pierde protagonismo frente a la avanzada libertaria.
La jornada electoral dejó un dato impactante: Manuel Adorni, vocero presidencial y figura clave del mileísmo, se impuso con el 30% de los votos, dejando atrás al peronismo y relegando al PRO a un tercer puesto impensado años atrás. Para Durán Barba, este escenario no hace más que confirmar lo que ya era evidente: “Macri no tiene lugar en el nuevo mapa político. LLA no lo necesita, y su aislamiento responde a una serie de errores que lo dejaron fuera del eje de poder”.
Según el consultor, el expresidente manejó mal la política y cometió errores de lectura desde su propia derrota en 2019. “Ya no lo necesitan. La gente que trabajaba con él, la más fanática, ya se fue con los libertarios. Y la que no estaba de acuerdo con ideas más extremas de derecha, ya se fue a otro lado”, explicó con crudeza.
Para Durán Barba, lo que se disputa hoy no es tanto la oposición al gobierno de Milei, sino quién representa mejor ese electorado de centroderecha: “El PRO no es oposición a Milei. En todo caso, disputan quién conduce ese electorado. Pero en las políticas van a coincidir”.
La contundencia de sus palabras refleja el desmoronamiento simbólico de un partido que supo gobernar la Ciudad por 16 años. La imagen de Macri solo y sin respaldo, como describió el consultor, marca un quiebre en la política argentina. “La política entró en una nueva fase —afirmó—, y quienes no supieron leerla quedaron, como dije, solos y sin color”.
El golpe de realidad para el PRO no solo reconfigura el tablero porteño, sino que plantea una pregunta incómoda: ¿hay futuro para el macrismo en esta nueva etapa dominada por los libertarios? Por ahora, las urnas respondieron con contundencia.
