Desde este miércoles 21 de mayo, los teléfonos celulares importados tributarán la mitad del arancel que pagaban hasta ahora. El Gobierno de Javier Milei publicó este martes el Decreto 333/2025 en el Boletín Oficial, mediante el cual formalizó la rebaja de aranceles para la importación de productos electrónicos, una medida que incluye además la baja de impuestos internos y la modificación del tratamiento fiscal para la producción en Tierra del Fuego.
La resolución, que lleva las firmas del presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Guillermo Francos y el ministro de Economía Luis Caputo, había sido anticipada la semana pasada por el vocero presidencial Manuel Adorni.
Según el texto del decreto, la intención del Poder Ejecutivo es abaratar el acceso a la tecnología para los consumidores argentinos, promoviendo a la vez una mayor inclusión digital. «Reducirá los precios de mercado y facilitará el acceso a los productos», afirma la norma, que se extenderá hasta el 31 de diciembre de 2038. Además, se anticipa que el arancel a los celulares quedará totalmente eliminado el 15 de enero de 2026.
Beneficios internos a Tierra del Fuego
Junto con esta medida, también se aplicó una rebaja en los impuestos internos: pasarán del 19% al 9,5% para celulares, televisores y aires acondicionados importados. En el caso de los productos fabricados en Tierra del Fuego, esa carga fiscal se reduce del 9,5% al 0%, buscando compensar la pérdida de competitividad que implicaría la apertura del mercado.
Desde el Gobierno sostienen que estas modificaciones tendrán un impacto directo en los precios al consumidor. Estiman una caída cercana al 30% en los productos electrónicos importados, lo que permitiría acercar los valores locales a los que se manejan en países vecinos. Actualmente, un celular de alta gama cuesta en Argentina alrededor de 2.566 dólares, contra 1.290 en España, 1.147 en Chile y 1.011 en Estados Unidos.
A la vez, el Poder Ejecutivo considera que este esquema estimulará una mayor competencia y una ampliación en la oferta de modelos disponibles, beneficiando tanto a los usuarios como al desarrollo del sector. También se espera que la baja de impuestos internos a la producción fueguina impulse inversiones y mejoras en la eficiencia.