El ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, lanzó una dura advertencia al Ejecutivo nacional al señalar que la paralización de la obra pública ya está dejando consecuencias visibles en el estado de las rutas nacionales. En una entrevista radial, el funcionario bonaerense aseguró que la actual gestión nacional “optó por abandonar su responsabilidad” en materia de infraestructura vial, lo cual calificó como “una decisión sin precedentes”.
“Es la primera vez que un gobierno nacional decide no hacer obra pública, y eso ya se nota: las rutas están cada vez peor”, afirmó Bianco en diálogo con Splendid AM 990. Su crítica no se limitó a la situación vial: también apuntó a los recortes presupuestarios que, según explicó, afectaron la educación, la seguridad y los municipios del interior de la provincia.
Bianco remarcó que la Provincia de Buenos Aires se encuentra supliendo con recursos propios algunas áreas desatendidas por Nación, especialmente en localidades golpeadas por las fuertes lluvias e inundaciones de los últimos días. “Estamos asistiendo a los municipios que quedaron bajo agua. A diferencia de Bahía Blanca, esta tormenta fue muy extendida y afectó gran parte del territorio”, subrayó.
Además, el ministro advirtió sobre la creciente demanda de asistencia financiera por parte de los gobiernos locales: “Los intendentes nos piden ayuda porque sienten que la Nación los dejó solos. Y esto se agrava con la caída del consumo interno, producto del impacto de las medidas económicas”.
En su declaración más contundente, Bianco denunció una “injusticia histórica” en el sistema de coparticipación, al afirmar que Buenos Aires, siendo la provincia más poblada, recibe una porción muy inferior de los recursos que necesita. “Nos están quitando fondos clave para sostener servicios esenciales. No se trata solo de rutas, sino de una visión de país profundamente unitaria que perjudica a millones de bonaerenses”, sentenció.
Con estas declaraciones, Bianco dejó en evidencia el creciente malestar del gobierno provincial ante la falta de diálogo y coordinación con la administración nacional, que insiste en una política de ajuste fiscal sin contemplar sus consecuencias territoriales.