El expresidente del Banco Nación, Carlos Melconian, analizó las recientes medidas anunciadas por el Gobierno para facilitar el uso de los dólares del colchón. Si bien consideró que la medida es acertada, aclaró que esto no es una solución estructural ni tendrá impacto de manera significativa en la informalidad económica de la Argentina.
Para el economista, la derogación de regímenes como el CITI o el COTI, que obligaban a reportar operaciones comerciales menores, es un paso correcto: «Eso no necesitaba ni conferencia de prensa ni presentación formal. Es una decisión administrativa lógica en un país con inflación, donde se necesita sentido práctico sobre qué controlar y qué no. No hacía falta hablar de una revolución fiscal», indicó el dirigente.
Por otro lado, Carlos Melconian criticó la falta de precisión sobre cómo se garantizará la legalidad del uso de los dólares del «canuto», algo que genera que quienes tienen ese dinero todavía no se arriesguen a usarlo: «Se habla de dar seguridad para usar el dinero, pero no hay blindaje, ni plazos de prescripción definidos. Eso todavía no está resuelto y dicen que debe resolverse en 30 días. Estamos entrando en zonas grises que abren más interrogantes que certezas».
También apuntó contra la manera que tiene el Gobierno de anunciar este tipo de medidas económicas: «Tus dólares, tu decisión, eso ya existe. No hace falta que venga un vocero presidencial a aclararlo. La bimonetariedad ya es un hecho social. La gente hace rato decidió ahorrar en dólares y transaccionar en pesos. Lo vivimos todos los días, eso no lo inventó ningún premio Nobel», ironizó en Radio Rivadavia.
Críticas al Gobierno
Criticó además el enfoque comunicacional del Gobierno y la falta de articulación entre medidas técnicas y políticas. «Sacar los dólares del colchón hubiera sido más potente si se presentaba junto con un blanqueo formal, dentro de la ley, bien comunicado. Así como está hecho, es todo medio tirado de los pelos. Como digo siempre: el canuto no se mancha. En la Argentina, la gente ahorra por las dudas. No hay ningún país del mundo donde se ahorre por si acaso. Acá sí, y eso tiene una razón histórica. El canuto existe por desconfianza. Y eso no cambia con una medida aislada».
Consultado sobre si estas disposiciones podrían modificar los hábitos de informalidad o aumentar el uso de efectivo, Carlos Melconian fue contundente: «No, por esto no. Ya ocurre. Cualquiera que va a comprar una moto, un auto o hacer una operación mediana, pregunta cómo quiere facturar el vendedor. ¿Qué queremos inventar? Nada de esto va a cambiar sin una política económica sólida y sostenida en el tiempo».