La Justicia de Bolivia revirtió este lunes una decisión clave del Tribunal Supremo Electoral (TSE) y restituyó la personería jurídica al Partido de Acción Nacional Boliviano (PAN-BOL), que impulsa la candidatura del expresidente Evo Morales. La resolución fue emitida por la Sala Constitucional Cuarta del Tribunal Departamental de Justicia de La Paz, en respuesta a un amparo constitucional presentado por la agrupación tras la cancelación de su registro a principios de mayo.
El fallo judicial sorprendió al escenario político y fue interpretado como un giro inesperado. PAN-BOL había perdido su personería por no alcanzar el 3% de los votos válidos en las elecciones generales de 2020. No obstante, la Sala ordenó al TSE emitir una nueva resolución debidamente fundamentada, considerando los argumentos expuestos por el partido.
Poco después del fallo, la presidenta de PAN-BOL, Ruth Nina, calificó la decisión como “histórica” y confirmó que la fórmula presidencial estará encabezada por Evo Morales y Wilma Alanoca. “Nuestros candidatos elegidos orgánicamente son: el señor Evo Morales Ayma como candidato a la Presidencia y la señora Wilma Alanoca como candidata a la Vicepresidencia”, declaró en conferencia de prensa.
Disputa institucional y calendario electoral en juego
Desde el Tribunal Supremo Electoral, el vocal Tahuichi Tahuichi Quispe advirtió que la resolución judicial no habilita automáticamente a PAN-BOL para presentar candidatos. Recordó que el plazo oficial para el registro de postulaciones venció el pasado 19 de mayo. En ese sentido, afirmó que “no corresponde ampliar el calendario electoral”, aunque señaló que la Sala Plena del TSE deberá emitir un pronunciamiento oficial al respecto.
A pesar de esto, el equipo jurídico de PAN-BOL sostiene que el registro fue presentado electrónicamente antes del vencimiento del plazo. También argumenta que el fallo judicial tiene efectos retroactivos y obliga al TSE a restituir la personería del partido. “La acción de amparo constitucional tiene cumplimiento obligatorio”, subrayó Nina.
El propio Evo Morales celebró la resolución como “una victoria del pueblo”. A través de sus redes sociales, exigió que el TSE reconozca a los candidatos ya inscriptos. “Corresponde que el TSE reconozca el registro de nuestras candidatas y candidatos para hacer efectiva nuestra participación en esta carrera democrática”, escribió.
Un fallo judicial frente a un antecedente constitucional
Más allá del respaldo judicial, la postulación de Morales enfrenta un obstáculo mayor. En diciembre de 2023, el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) emitió un fallo que prohíbe la reelección presidencial indefinida, tanto continua como discontinua. Esa sentencia se encuentra vigente y es de carácter vinculante.
Este antecedente genera incertidumbre sobre la legalidad de una eventual candidatura del exmandatario. Para muchos analistas, el fallo a favor de PAN-BOL reabre un frente de conflicto entre el órgano Judicial y el órgano Electoral.
El politólogo y profesor universitario Marcelo Silva advirtió que la situación podría derivar en una crisis de legitimidad institucional. En declaraciones a la agencia Xinhua, señaló que “la resolución judicial reaviva la figura polarizadora de Morales y empuja al país hacia una nueva controversia institucional, con efectos aún inciertos sobre el proceso electoral de 2025”.
De ese modo, el panorama electoral en Bolivia se vuelve cada vez más complejo. Si bien PAN-BOL ha recuperado su personería jurídica, el debate sobre la habilitación de Evo Morales como candidato presidencial está lejos de resolverse. Las próximas decisiones del TSE y la posible judicialización del calendario electoral marcarán el rumbo de una contienda que ya comenzó a polarizar el escenario político.
