Con consignas como «No al cientificidio», «Nadie se salva solo» y «Una nieve tóxica contra la ciencia y la universidad», investigadores y trabajadores del sistema científico nacional se movilizan este mediodía en distintos puntos del país para denunciar el ajuste presupuestario de Javier Milei en Ciencia y Tecnología. En la Ciudad de Buenos Aires, la manifestación principal será a las 13 horas frente al Polo Científico Tecnológico, mientras que en otras ciudades también habrá concentraciones. La protesta tiene una estética inspirada en la historieta El Eternauta y busca alertar sobre el impacto de la desinversión en ciencia y tecnología.
La convocatoria fue organizada por la Mesa Federal por la Ciencia y la Tecnología, la Red de Autoridades de Institutos de Ciencia y Tecnología (RAICYT) y diversas agrupaciones del ámbito científico. «Evitemos que nuestro país se quede sin ciencia, sin tecnología y sin futuro», expresaron los organizadores en los materiales difundidos en redes sociales. La acción apunta a visibilizar lo que consideran una «situación crítica» para el desarrollo económico, social y cultural de Argentina.
El recorte en el presupuesto nacional anual en Ciencia y Tecnología es de un 25%
«Estamos frente a una caída histórica de la inversión pública en el sistema científico-tecnológico nacional», advirtió la agrupación Economía Política Ciencia (EPC), que elaboró un informe con datos alarmantes. Según el documento, la Función Ciencia y Tecnología del Presupuesto Nacional caerá un 24,9% en 2025 y representará solo el 0,153% del PBI. «Esto implica una caída real del 55,5% en diez años», precisaron.
Además, el estudio señala que el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) sufrirá un recorte del 34,7% en el mismo período. El ajuste también impacta en los salarios del personal científico, con una merma real interanual del 28,4%, y en las becas, que registran una caída del 22,7%. Las organizaciones denunciaron además un proceso de “desmantelamiento” de instituciones estratégicas como el INTA, ARSAT y el propio CONICET.
La protesta se desarrollará en distintas ciudades. En Mar del Plata, la concentración será a las 12 en la Plaza de la Memoria de la Universidad Nacional; en Bahía Blanca, a las 10 en la sede del CONICET; en Bariloche, a las 12 en la Plaza de los Pañuelos; en Rosario, a las 11 en el CCT del CONICET; en San Miguel de Tucumán, a las 11:30 frente a la Casa Histórica; y en Ushuaia, a las 11 y 11:40 en dos puntos distintos. También se sumarán La Rioja, Mendoza, Puerto Madryn y Comodoro Rivadavia.
“El ajuste pone en jaque el futuro del país”, alertó una de las científicas convocantes en CABA. La marcha, bajo el lema del Eternauta “nadie se salva solo”, utiliza una potente simbología para interpelar a la ciudadanía. En ese sentido, los manifestantes apelan a la figura del héroe colectivo para resistir lo que definen como un “cientificidio” impulsado por el Gobierno nacional.
La ley de Financiamiento de la Ciencia, votada en 2021 por unanimidad en el Congreso, establecía que este año la inversión debía alcanzar el 0,45% del PBI. “Lejos de cumplir esa meta, el Gobierno profundiza el vaciamiento”, denunciaron desde la RAICYT. En redes sociales y calles, los científicos aseguran que seguirán defendiendo “el conocimiento como bien común” y reclaman una política pública que apueste al desarrollo soberano.
