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ESPECTÁCULO

«Me cancelaron»: Indignante, Santi Maratea realizó expresiones “gordofobicas” y las redes explotaron

Santi Maratea se disculpó con sus seguidores.

Santi Maratea
El influencer vivió una situación muy particular.

Santi Maratea acostumbra tener una permanente centralidad con base en sus polémicas frases o actitudes en las redes. Todo parecía en calma, sin embargo, una serie de comentarios con cierta carga de gordofobia, terminaron en escándalo. Posteriormente, el influencer tuvo que pedir disculpas. No obstante, cuestionó la sociedad moderna que no tolera el humor.

A través de su Instagram, Santi Maratea contextualizó lo sucedido y aseguró que fue automáticamente cancelado por sus expresiones. En este aspecto, expresó: «Hola, el otro día hice un video contando que bajé 10 kilos y en chiste dije que parecía un chancho con pelos y le agradecí a las pibas que estuvieron conmigo en ese momento. ¿Qué fue lo que pasó? Obviamente, me cancelaron. Y creo que tienen razón. Mucha gente me dijo que soy un gordofóbico».

Posteriormente, Santi Maratea hizo autocrítica y afirmó que aún tiene mucho que aprender. Además, manifestó: «Concluyeron en que soy una mier… de persona y la verdad es que me quedé pensando. Leo sus comentarios y no los subestimo, considero que puedo aprender mucho más yo de ustedes, que ustedes de mí», continuó en su descargo.

Por otro lado, Santi Maratea aseveró que a veces es mejor exteriorizar estos pensamientos para poder crecer como persona. Puntualmente, declaró: «Pero si soy gordofóbico, ¿qué hago con eso? No lo celebro, pero ¿lo escondo? ¿Si tengo prejuicios no es mejor mostrarlos así puedo verlos y cuestionarlos? Desde la postura de un comunicador, ¿es más sano aparentar ser perfecto, o ser transparente y tratar de mejorar?».

Finalmente, Santi Maratea concluyó que a pesar de las críticas, él tiene derecho a reírse de sí mismo sin temor a represalias. Por último, agregó: «No es un video para pedir disculpas, no creo que haga falta. Me parece que una reflexión honesta, aunque incomode, vale mucho más que cualquier discurso armado que busca no molestar. No quiero quedar bien, quiero lograr entenderme».