Ha sabido consolidarse como uno de los artistas más importantes de nuestro país. Y es que Flavio Mendoza ha sabido muy bien de qué manera ganarse el cariño del público con su gran talento. Sin embargo, esta vez fue noticia por lo que contó en una charla con La Nación sobre sus problemas de salud.
«En mi familia, los acróbatas y equilibristas, se retiraron a los 35 o 40 años, pero yo ya pasé el número cinco. Tampoco en el mundo debe haber artistas de mi edad que continúen con semejante exigencia física, aunque, obviamente, no hago lo mismo que hacía diez años atrás», comenzó diciendo.
Fue allí donde reconoció que convive a diario con fuertes dolores. «Lamentablemente tuve muchas lesiones. Hay dolores que me acompañan permanentemente. Tengo un clavo en el empeine de un pie. Hace más de veinte años me caí junto con mi hermana y me tuvieron que operar», afirmó.
«Cuando me intervinieron, el médico me dijo ‘¿tenés otra profesión? No sé si vas a volver a bailar’. Me angustié mucho. Me costó bastante tiempo dejar de renguear, pero, dentro de todo, zafé durante muchos años. Hace unos cinco años, el clavo me comenzó a molestar. No había analgésico, masaje o forma de poner el pie para que se me pasase el dolor. Incluso, me dolía horrores estando acostado, sin moverlo», aclaró Flavio Mendoza.
«Cuando consulté a un médico me dijo que se me había quebrado el clavo, algo que no es habitual que suceda. Decidí volver a operarme, con tan mala suerte, que lo hicieron mal. Mientras tanto, usaba plantillas, buscaba todo tipo de solución para que pasase el dolor, pero no había caso», expuso.
«Siempre con mucho dolor. Luego de la segunda operación, me subí rápido a la pista y se me terminó infectando la herida. Me veía muy mal. En este momento me duele el pie. Tengo ocho hernias de disco, convivo también con ese dolor. Tengo que dormir boca arriba, no puedo ponerme de costado, se me duermen los brazos. Soy una muñeca de trapo», sentenció.
