No hay dudas de que Lizy Tagliani es una de las figuras más destacadas del mundo del espectáculo. No solo es sumamente talentosa en lo que hace, sino que además es de las más queridas por la gente. El público siempre se encuentra pendiente de lo que sucede en su vida, tanto personal como laboral.
Pero desde hace semanas ya que Lizy Tagliani atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida, y tiene que ver con Viviana Canosa. La conductora generó un verdadero caos en la intimidad de la humorista, a quien denunció en Comodoro Py por supuesto abuso de menores y estar a cargo de un grupo de trata de personas.
Todo se dio justo antes de que Lizy Tagliani cerrara la adopción de su hijo, la cual, gracias a la denuncia de Viviana Canosa, no pudo terminar de cerrarse. Íntimo amigo de la humorista, Marcelo Polino reveló cómo se encuentra esta en medio de la batalla judicial y cuál es su mayor miedo tras ser acusada por la conductora.
«Todo el grupo quiere justicia. En el caso particular de Lizy tiene un aditivo muy importante que está en juego la adopción de su hijo. Es el punto que la tenía más preocupada, al menos en lo privado», señaló Marcelo Polino en conversación con el ciclo Mediodía bien arriba (TV Pública).
«El juzgado que tiene la causa del niño es muy respetuoso en las formas y la contienen un montón. Pero de todas maneras hasta que esta causa no caiga, ningún juez firma una adopción plena si hay uno de los papás involucrado en una situación con la Justicia», contó Marcelo Polino sobre cómo sigue el proceso de adopción para Lizy Tagliani.
«En todos los casos es igual. Yo ayudo a formar carpeta de parejas que quieren adoptar. Me ha pasado de gente que no es famosa y quiere adoptar y ha aparecido una causa de alguno de los adoptantes. En muchos casos volvió atrás y en otros hasta que no se solucionó no lo firman. Me parece perfecto», continuó.
«Desde la experiencia que tengo creo que esto va a llegar a buen término pero hasta que no caiga la causa el niño no va a poder pasar a la adopción plena. Es un trámite bastante largo. Una vez que el juez lo da, los papás tienen que hacer un juicio de adopción para poder ponerle el apellido y eso lleva otro tiempo», cerró el periodista.
