Connect with us

Hola, qué estás buscando?

MUNDO

Estados Unidos atacó e Irán ahora baraja sus cartas: bloqueo, aliados o contraataque

Teherán evalúa tres vías: cerrar el estrecho de Ormuz, activar milicias o escalar su programa nuclear.

Irán

Los ataques aéreos lanzados por Washington contra tres sitios nucleares en territorio iraní cambiaron el tablero de poder en Medio Oriente. Teherán, con décadas de acumulación militar dentro y fuera de sus fronteras, ahora tiene que decidir entre contener la crisis o intensificar el conflicto. Cerrar el estrecho de Ormuz, activar sus aliados regionales o reactivar su programa atómico están entre las principales alternativas.

El Parlamento iraní ya deslizó una posible respuesta: cerrar el estrecho de Ormuz, por donde circula uno de cada cinco barriles de petróleo del mundo. Con apenas 33 kilómetros de ancho en su punto más angosto, el canal es vital para el comercio energético global.

Irán dispone de una flota de lanchas rápidas, minas submarinas y capacidad misilística que, en un escenario extremo, podría volver intransitable esa vía. Washington respondió que un bloqueo sería un «suicidio económico» para Irán, pero también dejó en claro que garantizará la libertad de navegación en la zona.

Misiles, drones y objetivos estadounidenses a tiro

Con bases militares estadounidenses en Kuwait, Bahréin, Qatar y Emiratos Árabes Unidos, la posibilidad de un ataque directo a tropas o instalaciones aliadas es otra carta que el régimen podría jugar. La proximidad geográfica reduce el margen de defensa: los sistemas antimisiles podrían no tener tiempo suficiente ante una oleada de drones o proyectiles.

Irán también ha mostrado capacidad para golpear refinerías y plantas de energía en la región, como ocurrió en Arabia Saudita en 2019. Aquellos ataques, atribuidos a Teherán aunque reclamados por los hutíes, demostraron que el alcance va más allá del enfrentamiento convencional.

Una red de aliados aún operativa

Aunque Hamás y la Jihad Islámica quedaron diezmados por los ataques israelíes en Gaza, y Hezbollah sufrió graves bajas en el sur del Líbano, Irán mantiene vínculos con milicias en Irak y Yemen. Los hutíes, en particular, han amenazado con actuar si Estados Unidos intervenía directamente.

Además, la posibilidad de acciones encubiertas fuera del escenario bélico inmediato —como en América Latina o Europa— no puede descartarse. Irán ya fue señalado en el pasado por ataques a intereses judíos en el exterior.

La opción nuclear: ¿una línea de no retorno?

Las instalaciones bombardeadas por Estados Unidos podrían haber sido claves, pero no destruyeron el programa nuclear iraní. Según analistas, apenas lo retrasaron. Irán mantiene infraestructura subterránea y dispersa que podría volver a operar.

Una ruptura con el Organismo Internacional de Energía Atómica y la salida del Tratado de No Proliferación serían pasos decisivos hacia el desarrollo de un arma nuclear. Es un camino que ya recorrió Corea del Norte. Si Irán lo hace, dejaría atrás años de diplomacia y entraría en una zona de riesgo máximo.

Una nueva fase del conflicto

Desde el ataque israelí del 13 de junio, la región entró en un espiral de fuego cruzado. La intervención de Estados Unidos marca un punto de no retorno. Irán ya no responde solo por sus intereses, sino por su capacidad de sostener el equilibrio de fuerzas en el mundo islámico.

La respuesta de Teherán no será inmediata, pero cuando llegue podría modificar el mapa estratégico del planeta. Mientras tanto, la pregunta no es si habrá una reacción, sino cuál será el precio.