Un momento cargado de sentimientos fue el que se vivió en Canal Trece, más precisamente en Almorzando con Juana, el programa que lleva adelante Juana Viale y que se emite todos los domingos. Fue allí donde volvió a entrevistar a sus invitados.
Uno de ellos fue nada más y nada menos que Rodrigo Vagoneta, uno de los humoristas más queridos de nuestro país, quien ha sabido muy bien de qué manera ganarse el cariño del público que disfruta de su humor desde hace años. Pero esta vez, contó parte de su vida.
Todo sucedió cuando le preguntaron cómo se acercó al ambiente artístico, algo que se terminó dando después de la muerte de su madre, cuando él era tan solo un niño. «Yo acompañando a mi papá al teatro… Él vive, tiene 83 años», comenzó diciendo delante de Juana Viale.
«Vive gracias a Dios, es mi coach. Salgo de Bendita TV y le escribo o lo llamo y él me dice ‘muy bien, hijo, estuviste muy bien’. Me gusta porque lo disfruta conmigo.Íbamos a las obras de teatro y me gustaba la magia que sucedida en el lugar místico», expresó.
«Él era actor. Cuando quedaba una mancha de sangre en el escenario… me gustaba esa cosa que tiene el teatro. Ahí empezamos. Después fui al conservatorio. Cuando partió mi mamá yo tenía ocho años, fuimos al hotel de actores y había un director», dijo Rodrigo Vagoneta.
«Preguntaron quién quería actuar y me tiré de palomita. A mí me salvó la vida la actuación. Yo estaba re triste… era un niño muy triste por lo que me había pasado. Mis compañeros me decía ‘no podemos creer que el mismo nene que no hablaba hoy trabaja de hablar’. A mí el arte me salvó», sentenció.
