Max Verstappen confirmó porque es el mejor piloto de Fórmula 1 de la actualidad con una proyección a quedarse en el salón de la fama de los mejores de la historia. El Sprint del GP de Bélgica fue una clara muestra de la capacidad que tiene el actual campeón del mundo para lograr vencer con su Red Bull a sus rivales con una clara superioridad conductiva y psicológica que deriva en una impresionante racha en la que ha ganado casi la mitad de las carreras Sprint que lleva disputada la categoría desde su implementación.
El hombre fuerte de Red Bull ganó con una clara autoridad luego de superar a Oscar Piastri en la primera vuelta de competencia y a partir de allí empezar a construir un dominio en pista por medio de golpes psicológicos en cada vuelta. Max no cuenta con el mejor auto, pero si cuenta con la posibilidad de exprimir el potencial de su auto al máximo y eso lo hace diferente. Detrás del neerlandés terminó Oscar Piastri con el Mclaren mientras que Lando Norris se recuperó de una mala salida y pudo subir al podio en el tercer lugar.
Ferrari volvió a decepcionar con un auto que no logra alcanzar al lote de punta y Charles Leclerc terminó en el cuarto lugar delante de la sorpresa del día, Esteban Ocon quien logró meter al HAAS dentro de los cinco mejores del clasificador. Carlos Sainz terminó sexto y confirma su progreso dentro de la actual fecha luego de un comienzo complicado en los entrenamientos cuando el equipo lo llamó a boxes apenas iniciada la tanda de ensayos por problemas mecánicos.
Lewis Hamilton fue otra decepción. El inglés tuvo problemas en la clasificación y no pudo pasar la Q1 y desde allí hasta este momento, el siete veces campeón del mundo se mantiene un flojo nivel lejos de los punteros y con un auto que parece no reaccionar a las exigencias que propone el británico. Ferrari sigue sin encontrar el rumbo que merece la escudería más importante de la historia de la Fórmula 1.
Otro paso en falso de Alpine en Bélgica
La situación de Alpine es frustrante. Franco Colapinto largo 19 y llegó en el mismo puesto de largada. El argentino no pudo hacer nada ante un rendimiento muy complicado y bajo en su nivel. Un auto que carece de potencia motora y muestra un déficit en el transito de curvas rápidas una característica saliente del trazado de Spa-Francorchaps. Su compañero de equipo Pierre Gasly sufrió antes de salir a pista. Un problema en la unidad de potencia puso en apuros al equipo Alpine que no logró poner el auto del francés en la grilla.
El problema es serio. Las complicaciones invaden la intimidad del equipo y recién llegamos a la mitad del fin de semana. Las proyecciones de mejoras inmediatas parecen un sueño lejano y la posibilidad de soñar con una actuación medianamente destacable parecen algo lejanos y difícil de alcanzar a corto plazo. En esas condiciones aparecen las criticas a los pilotos, apuntando principalmente al argentino que no logra superar los puestos de cola de la grilla de la Fórmula 1.
