En las redes sociales, así como en los medios de comunicación, se dio a conocer que Pampita organizó un gran festejo para celebrar los 4 años de su hija Ana, y entre los invitados sorprendió la presencia de sus ex: Benjamín Vicuña y Roberto García Moritán, quienes asistieron acompañados por sus respectivas parejas.
El evento familiar, ambientado con detalles de Stitch —personaje favorito de la nena—, tuvo globos, cotillón y una gran torta, pero contó también con amigos y familiares cercanos tal y como era de esperar. Sin embargo, lo que nadie se imaginó es que a la celebración asistiría Benjamín Vicuña, su expareja. Pues quedó claro que la fiesta, preparada durante sus vacaciones en la Patagonia, fue un reflejo de la armonía entre todos.
Ante preguntas sobre el rol del padre biológico, Pampita aprovechó la ocasión para defender públicamente la relación de Vicuña con sus hijos mayores: “Siempre voy a hablar de lo buen padre que es porque es una realidad…” y añadió que sus hijos “lo admiran” y que ese es “nuestra verdad.”
Por su parte, Moritán asistió con su nueva pareja, la modelo Priscila Crivocapich, quien fue parte del reencuentro familiar sin generar roces ni controversias públicas.
La presencia de Vicuña también permitió que sus hijos mayores, Bautista, Benicio y Beltrán, compartieran junto a su hermana y familia ensamblada, en una muestra de madurez emocional y armonía parental.
Tras esta publicación en el Instagram de Pampita, el evento fue una demostración de que, pese al pasado y los cambios en las relaciones, existe un espacio de respeto y unidad que prima, sobre todo, por el bienestar de los niños y por sostener vínculos de familia extendida en paz.