Vanina Escudero fue una de las invitadas a la mesa de Mirtha Legrand y habló de la difícil etapa que atravesó con su hermana Silvina. Aunque en medio de la entrevista admitió que hubo un alejamiento, también dejó en claro que la reconciliación llegó y que hoy la relación, por suerte, está en calma.
“Por más que hayamos estado distanciadas, el amor de hermanas y de familia siempre estuvo. Nunca quisimos hablar ni contar lo que había sucedido, eso quedó entre nosotras”, explicó la bailarina dejando en evidencia que el respeto mutuo fue clave para transitar el conflicto entre hermanas.
Durante la charla, Vanina también remarcó que ambas comparten la misma mirada sobre la importancia de priorizar los lazos familiares. “Creo que las dos le ponemos un valor enorme a la familia, y más allá de las diferencias, pudimos subsanarlas”, al tiempo que reconoció que no se trató de un proceso sencillo, sin embargo, lograron recuperarse de sus diferencias.
En cuanto a los tiempos, la bailarina minimizó las versiones que hablaban de un quiebre prolongado. “Estuvimos unos meses distanciadas. Lo que pasa es que había mucha exposición el año pasado y parecía más largo, pero fueron solo unos meses”, detalló en el programa La Noche de Mirtha.
Consciente de la repercusión mediática, Escudero también explicó por qué nunca profundizó en los motivos del conflicto. “Hay cosas que es mejor mantener en familia. Está bueno respetar esos límites”, señaló a la par que cerró la puerta a las especulaciones que circularon en el último tiempo.
Finalmente, Vanina celebró el presente y dejó un mensaje esperanzador durante su conversación con Mirtha Legrand: “Hoy estamos bien, y eso es lo que realmente vale”. Con esa frase, resumió la etapa de reconciliación que vive con Silvina y su decisión de no dejar que el pasado opaque el vínculo entre hermanas.
