La FIFA dio a conocer el calendario oficial de la Copa Intercontinental 2025, un torneo que reúne a los campeones de todas las confederaciones y que tendrá como gran protagonista al París Saint-Germain, ya clasificado a la final por haber conquistado la última Champions League. En este contexto, varios equipos argentinos todavía sueñan con ser parte del certamen.
El primer partido será el 14 de septiembre, con el cruce entre Pyramids FC de Egipto y Auckland City de Nueva Zelanda. El ganador enfrentará el 23 de septiembre a Al Ahli FC de Arabia Saudita, campeón de la Liga de Campeones de Asia, en el Estadio Rey Abdullah.
Camino hacia la gran final
El vencedor de la llave África-Asia-Pacífico avanzará al siguiente escalón, donde deberá medirse al campeón del llamado “Derbi de las Américas”, que enfrentará a Cruz Azul (ganador de la Concacaf 2025) con el campeón de la Copa Libertadores 2025. Ese duelo está programado para el 10 de diciembre, con sede a confirmar.
De allí saldrá el rival para la Copa Challenger de la FIFA, que se disputará el 13 de diciembre, y que definirá al segundo finalista del torneo. Finalmente, el 17 de diciembre se celebrará la gran final contra el PSG, que esperará en busca de sumar otro título internacional.
Los equipos argentinos que pueden clasificar
El representante de Conmebol aún no está definido, pero cuatro equipos argentinos tienen chances concretas de acceder a la Intercontinental. Se trata de Racing, Vélez, Estudiantes de La Plata y River Plate, todos clasificados a los cuartos de final de la Copa Libertadores.
Los cruces determinarán qué club argentino podrá seguir en carrera: Racing enfrentará a Vélez, mientras que Estudiantes jugará ante Flamengo y River se medirá con Palmeiras. Para llegar a este nuevo torneo organizado por FIFA, cualquiera de ellos deberá consagrarse campeón de la Libertadores, lo que implica ganar cinco partidos decisivos en la recta final del certamen.
La expectativa es máxima, ya que la posibilidad de ver a un equipo argentino enfrentando al PSG en un torneo oficial de FIFA no solo sería histórica, sino también una vitrina inmejorable para el fútbol sudamericano.