Frente a la renuncia de Máximo Kirchner como presidente del bloque del Frente de Todos, el Gobierno nacional comenzó a buscar un reemplazante en las últimas horas de ayer que sirva de nexo entre el peronismo y el kirchnerismo, las dos posturas dentro del oficialismo. El elegido fue Germán Martínez y en las últimas horas Alberto Fernández lo recibió en Casa Rosada.
Por medio de su cuenta de Twitter, el mandatario argentino lo anunció de manera oficial en su nuevo cargo y argumentó que fue electo por «su compromiso y trayectoria» dentro de la política argentina que es «muy valiosa para profundizar los consensos y trabajar por leyes que mejoren la vida de las argentinas y argentinos» de aquí en adelante.
Sumado a esto, el presidente reconoció que le pidió «que profundice el enorme trabajo que hizo Máximo Kirchner» al frente de la bancada oficialista. Al respecto, el máximo funcionario admitió que está «muy agradecido» con el trabajo del diputado e hijo de la vicepresidente que sabe «que va a continuar» desarrollándose pero desde otro plano que lo exponga menos.
¿Por qué eligieron a Germán Martínez antes que a los demás?
Dentro de las alternativas que tenía el Frente de Todos con Eduardo Valdés (vacunado VIP), José Luis Gioja, Cecilia Moreau, Leandro Santoro y Victoria Tolosa Paz, decidieron darle el cargo a Germán Martínez porque se autoproclama como «peronista y kirchnerista, sin contradicción» y consideran que su llegada a la presidencia puede ser fundamental para terminar con las diferencias entre las facciones del oficialismo.
Además, fue uno de los primeros en celebrar el acuerdo logrado con el FMI y remarcó que en el Frente de Todos hay «matices» pero que no hay problemas entre los que buscan solucionar el problema que dejó el macrismo. Teniendo cono parámetro eso y sus años de militancia en Santa Fe por el peronismo más su cercanía con el exministro de Defensa, Agustín Rossi, lo hacen ser un nombre poco conocido pero con mucho alcance interno.
