Dejó muy en claro todo lo que piensa. Sin lugar a dudas, el tema que ha conmocionado a millones y millones de argentinos en estos últimos días, tiene que ver con los incendios que se han desatado en la provincia de Corrientes. Fue en su programa de Radio Rivadavia, «Cristina en el Medio», donde Cristina Pérez apuntó contra el presidente Alberto Fernández por la postura que tomó en torno a esto.
«Con el país movilizado y consternado, con los reclamos correspondientes para que apareciera, con el telón de fondo de una tragedia creciente y de una respuesta lastimosa del estado, puesto contra las cuerdas por la realidad y por qué no, hasta por la eficiencia de un chico, al romper un silencio incomprensible el presidente dijo: ‘En Corrientes hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance’. Mejor casi que no hubiera hablado. O sea, como ya sabemos, no estuvo a su alcance apagar el fuego. No estuvo a su alcance llegar a tiempo. Como la mayoría de los problemas que aquejan al país y su magnitud: el presidente podría responder lo mismo ante todos, porque definitivamente parecen no estar a su alcance. Inflación, inseguridad, una mínima noción de certeza», arremetió.
Sin guardarse nada, Cristina Pérez continuó con su descargo. «Lo peor es que no fue una declaración de impotencia o un pedido de disculpas o un reconocimiento de la incapacidad evidente del área y del estado. El presidente era el que estaba enojado por ser cuestionado. Nadie le pedía un tuit. Lo increíble es que con el país contemplando su frivolidad al elegir hacer papelones en la playa en vez de apersonarse en la tragedia, el presidente sólo atinó a confirmar en la cara de los argentinos que no está a la altura», arremetió.
«Que tuvo tiempo de ir a Mar de Ajó a atajar penales pero no de conmoverse siquiera por el drama de Corrientes. En los últimos días, las imágenes desoladoras de los incendios que carbonizan los esteros del Iberá, hacen llorar a medio país. ¿En qué estado interior, esa catástrofe no conmociona? Se trata ante todo, de lo que se espera de un presidente en las horas más difíciles. ¿Alguien puede explicar la cobardía de no ir al lugar del desastre?», indagó.
«¿Es indolencia o es temor a dar la cara? ¿Es cinismo o impiedad? ¿Qué espera el presidente para ir a Corrientes? No sólo debía informar qué estaban haciendo en vez de esconderse. Aunque no quiera asumirlo, también le corresponde asumir el liderazgo en la desgracia. Aunque no sea una tradición política en el espacio al que pertenece donde el estilo prevaleciente es borrarse cuando las papas queman», lanzó indignada.