En medio de las discusiones sobre la letra chica del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el pedido de achicar el gasto público, los distintos sectores políticos ponen sobre la mesa un cúmulo de propuestas para ahorrar fondos. En las últimas horas ingresó al Congreso un proyecto que plantea al Poder Ejecutivo y el Banco Central que creen billetes de 20 mil pesos para ahorrar costos operativos en emisión monetaria.
De acuerdo a la información de la cuenta Financias Argy, el diputado nacional de Juntos por el Cambio Federico Angelini presentó la iniciativa que, según señala, generaría un ahorro de hasta 400 millones de dólares. Para esto, propuso a la Casa Rosada impulsar la creación de los billetes de $2 mil, $5 mil, $10 mil y $20 mil a fin de achicar el volumen de impresión.
«La caída del valor de compra del billete de máxima denominación tiene consecuencias que van más allá de la inflación y representan una erogación muy importante para bancos, instituciones financieras, comercios, empresas y pymes, generando costos de logística, seguridad, tiempo y espacio», argumenta el texto que ya está en el parlamento.
Según datos oficiales, la “maquinita” de hacer billetes explotó al cierre del 2021 y la impresión de papeles de 1.000 pesos aumentó un 25,2% en un solo mes. El detalle precisa que en diciembre del año pasado la emisión de de unidades de $1.000 pasó de 1332,1 millones de unidades a 1.668 millones de ejemplares. Y al analizar todo el año, aumentó 80% el volumen de esta máxima denominación en circulación entre bancos y el público.
Frente a este escenario, el legislador opositor remarcó la pérdida de valor de la moneda ante la inflación y fundamentó que “un billete de tan poco valor en términos de poder de compra representa un costo mayor para el Estado a la hora de emitir”. En este sentido, remarcó que si se avanza en la iniciativa “permitiría un ahorro de entre 300 y 400 millones de dólares”.
Pérdida del valor de la moneda
A su vez, explicó que en los últimos 50 años Argentina le quitó 13 ceros a la moneda, al tiempo que advirtió la posibilidad de que “le quitemos 3 más próximamente”. «Eso se refleja en que el billete de máxima denominación hoy es el segundo entre los de menor valor, en dólares, en toda la región, sólo detrás de Venezuela», sostuvo.
Cuando comenzó a circular el billete de $1.000 en diciembre de 2017, cada unidad equivalía a unos U$S57, según el tipo de cambio oficial de ese momento. Hoy, poco más de cuatro años después, la misma comparación indica que un billete del hornero equivale a U$S 9,61. Incluso, si tomamos el contado con liquidación como referencia, rondaba los U$S4,09 al 31 de enero pasado.
