El conflicto de Ucrania y Rusia escaló a nivel mundial. La mayoría de los países han tomado posición respecto al tema. En su mayoría, han pedido que Vladimir Putin cese con su presión sobre el país vecino. La Cancillería de Argentina decidió lanzar un comunicado donde no se encolumnó en ninguna de las naciones en tensión. No es la primera vez que el Gobierno de Alberto Fernández tiene posturas polémicas.
Los cruces que ocurren en el este de Europa ha escalado a un nivel peligroso los últimos días. Los mandatarios de algunas de las potencias mundiales se han expresado contra cualquier tipo de invasión que tenga planeada Vladimir Putin. En el caso de Joe Biden la advertencia fue más drástica ya que indicó que si Rusia invade a Ucrania «tendrá severas represalias».
Mientras en gran parte del planeta tierra piden sanciones considerables si Rusia ataca a su vecino, Argentina reclamó pidió «una solución pacífica». «El Gobierno argentino reafirma la necesidad de que todas las partes involucradas avancen en una negociación diplomática que permita una salida política a la creciente tensión en el este de Ucrania, a fin de mantener la paz y la seguridad internacionales”, explica el Boletín Oficial.
Durante mayo del pasado año, la Cancillería también recibió críticas por su posición en la disputa entre Israel y Palestina. El comunicado oficializado por el organismo estatal, aseveró su preocupación por «el uso desproporcionado de la fuerza por parte de unidades de seguridad israelíes». Este mensaje produjo una gran indignación en la comunidad israelí en Argentina y Alberto Fernández se tuvo que reunir con el director de la DAIA.
Al igual que el anterior caso, en el 2021, Argentina estuvo bajo el ojo de la tormenta después de abstenerse en la discusión sobre la violación de DDHH en Honduras. La votación fue regida por la OEA. Allí 26 países condenaron el accionar del presidente Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo. Solo tres países votaron negativamente. Argentina decidió no tomas posición y se abstuvo.