Desde la asunción de Alberto Fernández a la Presidencia, la relación entre la Nación y la Ciudad de Buenos Aires no es la mejor. Desde diciembre de 2019 hasta la actualidad, se dieron múltiples cruces, ya sea por dinero o por medidas sanitarias. Pero la mayoría con algo en común: la judicialización. En este caso, la Corte Suprema de Justicia de la Nación llamó a una audiencia por la coparticipación.
En medio de la discusión entre las mismas partes por el traspaso de 32 líneas de colectivo al ámbito de la Capital de Federal, el máximo tribunal del país convocó para el próximo 10 de marzo a una reunión entre las administraciones de Fernández y Horacio Rodríguez Larreta para abordar en detalle el tema de la quita de la coparticipación que recibe la Ciudad Autónoma, según consignó NA.
Al encuentro asistirán los cuatro integrantes de la Corte Suprema de Justicia, junto a representantes del Poder Ejecutivo y del Gobierno porteño. Justamente esta última administración había iniciado en 2020 una disputa judicial por los fondos que la Nación le recortó en ese momento, al considerar que había recibido de más durante el traspaso de la Policía local.
Ahora, el máximo tribunal convocó a esta audiencia entre las partes involucradas antes de resolver sobre la cuestión planteada por la Ciudad de Buenos Aires. La misma será una suerte de conciliación entre las partes, una invitación a una solución concordada para evitar que la Corte deba emitir un fallo dándole la razón a uno u otro, en momentos donde el tribunal está siendo cuestionado por el kirchnerismo y a pocos meses de fallar a favor de Rodríguez Larreta en torno a las clases presenciales en pandemia.
¿En que quedó la quita de la coparticipación?
Esta pelea viene de 2020, cuando la Nación le quitó fondos de la coparticipación. En su momento, Fernández afirmó que su antecesor en el cargo, Mauricio Macri, había otorgado mayores recursos a Rodríguez Larreta de los que le correspondían. Según un cálculo del Ministerio de Hacienda de la Nación, la Ciudad perdió $120.000 millones, algo a lo que ahora se le sumaría la quita de los fondos por los colectivos.
La pérdida en CABA en un año
En este sentido, el año pasado, cuando se cumplió el primer aniversario del recorte dispuesto a las transferencias a CABA en concepto de Coparticipación Federal de Impuestos, para la Capital esa decisión del Presidente significó una pérdida equivalente a 1.000 millones de dólares, al pasar del 3,5% al 2,32% y luego al 1,40%.
La decisión tomada en los primeros días de septiembre de 2020 por Fernández y luego plasmada en una ley de Congreso implicó que en los últimos 12 meses el aumento nominal global de la Coparticipación del 58,9% mostrara una diferencia sustancial entre la caída del 31,9% en los giros a la Ciudad y el alza del 63,3% para las 23 provincias, de acuerdo a una medición de la consultora Aerarium en base a datos oficiales.
En consecuencia, la brecha en perjuicio del distrito porteño es de 95,2 puntos porcentuales en la comparación nominal, mientras que en términos reales el perjuicio es de 62,7 puntos, producto de una caída interanual del 55,2% para CABA y un alza del 7,5% para el conjunto de provincias. De esta forma, la pérdida acumulada desde septiembre de 2020 alcanza a $84.163 millones, los cuales convertidos a dólares según la cotización oficial de cada mes transcurrido, “equivalen a 104 millones mensuales y 934 millones para todo el período”.
Otras peleas «no monetarias»
En los últimos tiempos, la relación entre Nación y CABA también se tensó por otras cuestiones como, por ejemplo, la educación en tiempos de coronavirus; el estado y la saturación de los establecimientos sanitarios en medio de la pandemia; y hasta las flexibilizaciones sobre las restricciones mientras regía la segunda ola. De hecho, en el primer punto, cabe destacar el fallo a favor que tuvo la Corte con la Ciudad en mayo último respecto a la presencialidad en las aulas, luego de que el Presidente decretara su suspensión por 15 días consecutivos.
¿Y el traspaso de colectivos?
El Gobierno nacional está en la búsqueda de traspasar 32 líneas de transporte público a la Ciudad. Esto implicaría dejar de girar unos $14.600 millones en subsidios, que actualmente se dirigen a los colectivos que solo circulan dentro de la Ciudad. En tanto, se mantendrían los subsidios de las líneas inter jurisdiccionales, es decir, las que circulan por la Capital y la provincia de Buenos Aires.
En una reunión llevada a cabo este mismo jueves, parece haber acuerdo entre las partes para el traspaso, según informó el secretario de Gestión de Transporte nacional, Diego Giuliano. “El impacto (en el costo del colectivo) tendrá que ver con la decisión que tome la Ciudad de asumir el impacto”, remarcó el funcionario. Esto podría repercutir en una suba del valor del pasaje. Giuliano sostuvo además que se inició un proceso para completar el traspaso, por el cual el Poder Ejecutivo espera que “cada uno asuma su responsabilidad “a nivel transporte.
“Fue muy interesante la aceptación o, por lo menos, el análisis que la Ciudad ha asumido en este tema. Quedan temas a considerar, tenemos una agenda de trabajo”, explicó Giuliano. En medio de la resistencia de la administración porteña, que no quiere pagar el costo político de elevar el valor del pasaje, el secretario de la cartera que dirige Alexis Guerrera señaló que “no es una cuestión forzada, sino que la Ciudad tiene que hacerse cargo de sus servicios y de sus competencias”.
“Tenemos una ley nacional que establece la competencia. Nuestra tarea ha sido plantear la forma de que la Ciudad asuma la forma de su compromiso con pasajeros y pasajeras, y pueda asumir su compromiso en la misma manera que las provincias”, subrayó. Ahora, quedó pautada para el próximo 22 de febrero una nueva reunión para continuar con el traspaso de las 32 líneas que circulan dentro del territorio porteño.