Muy fuerte. Así es lo que se ha vivido en el mundo del espectáculos los últimos días, debido a la muerte de Gustavo Martínez. Y es que la expareja de Ricardo Fort, terminó con su vida al lanzarse de un piso 21, en el edificio donde vivía con Marta y Felipe Fort. Ahora, fue Marina Calabró, una de las figuras más cercanas a la familia, quien rompió el silencio.
En diálogo con «Intrusos», la periodista de espectáculo habló del último encuentro que tuvo con el ex del empresario chocolatero, cuando grababan la serie que tanta polémica ha despertado. «Para quienes fuimos de alguna manera parte de la vida de Ricardo, Gustavo siempre fue un pilar para él, para su casa y sus hijos», comenzó manifestando.
«Nos habíamos cruzado en octubre, en la filmación de El Comandante y me había llamado la atención, primero, que lo vi apagado», señaló Marina Calabró dejando muy en claro que no lo vio de la mejor manera. «Lo vi como ido de la escena, como que no conectaba. Adrián y Cesar lo iban llevando. Le tuvieron que decir quienes estábamos», aseveró.
«Nos presentaron y no por una cuestión de cortesía. No podía creer que no me reconociera porque estuve en la casa, comiendo con ellos. Ahí ya se hablaba de una depresión. Entiendo el dolor de Felipe, de los chicos y que desde el dolor se dicen un montón de cosas. Pero ese hombre no podía cuidar a nadie. Lamento que este haya sido el desenlace de un hombre bueno, que amó a Ricardo y su familia y que dio la vida por esos chicos… y que no pudo», finalizó la morocha.
La situación era complicada
En el mismo ciclo, fue Virginia Gallardo quien confirmó que cuando la contactaron para ser parte de la serie, Gustavo ya estaba mal. «¿Cuál era su estado en ese momento? Hoy salen a decir que no tenían idea. Gustavo Martínez ya estaba enfermo. El pedido que se me hizo en ese momento es que no diga nada porque corría riesgo la tutela de los hijos. Lo entendí y lo respeté. Era prestar mi imagen y mi historia a personas que nunca fueron parte. La única persona que podía hablar de esto era Gustavo y él ya no estaba en condiciones. Quizás ahora se entienden mis broncas, mis enojos, mis llantos, mi impotencia», apuntó la panelista.
